Isabella Valdiri, la primogénita de Andrea Valdiri, cumplió 13 años en marzo de 2024 y, como regalo de su madre, recibió en aquella ocasión un apartamento ubicado en un exclusivo sector de Barranquilla. Sin embargo, fue hasta este 20 de enero que la menor conoció su propiedad.
Así quedó en evidencia gracias a una publicación que la influenciadora compartió a través de sus redes sociales.
Así es el apartamento de la hija de Andrea Valdiri
De acuerdo con lo que se observa en las imágenes publicadas por la barranquillera, la mayor de sus dos hijas reaccionó entre lágrimas al abrir la puerta y poner un pie en su primera propiedad.
Aunque el apartamento de Isabella todavía está en obra gris, Andrea Valdiri advirtió que la adolescente podrá remodelarlo y decorarlo a su gusto, y en esto también contará con su apoyo.
La influenciadora de 33 años también le propuso a su hija que adecuaran el apartamento para convertirlo en una oficina y, de ese modo, pueda recibir un ingreso mensual por temas de arriendo. Esto le permitiría ahorrar un capital para su carrera universitaria, mientras que cumple la mayoría de edad y puede independizarse.
“A los hijos, desde chiquitos, hay que enseñarlos a ahorrar y trabajar. Ellos tienen que aprender que las cosas se obtienen con sacrificio, disciplina y sudor”, agregó Andrea Valdiri, quien recibió una gran cantidad de elogios por esta iniciativa.
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@andreavaldirisos1 Te amo mona❤️
♬ KAI - Greeicy
La vida de Andrea Valdiri antes de su trabajo en redes
La celebridad atlanticense, que se coronó en 2015 como reina del certamen Señora Colombia, no siempre ha tenido una vida llena de lujos y comodidades, como la que presume en la actualidad. Así lo contó en Machichoneando, segmento que tiene en sus redes sociales para hablar sobre su vida personal.
La influenciadora comentó que, antes de dedicarse a la creación de contenido, fue practicante de Dirección y Producción de Radio y Televisión en una compañía farmacéutica. Allí era la encargada de administrar las publicaciones en redes sociales.
Mientras Andrea Valdiri fue estudiante universitaria tuvo un puesto ambulante de arepas que prestaba servicio entre las cuatro y siete de la mañana, y luego debía ir a entrenar porque tenía una beca deportiva. Después de mediodía se trasladaba a un local de ropa en el que trabajaba hasta las seis de la tarde y su día concluía en la universidad, donde tenía clases hasta las diez de la noche.
