Una vez más el más reciente estreno de Ryan Murphy se convierte en tendencia. En esta oportunidad, es su creación, junto a Ian Brennan, para Netflix, sobre el asesino en serie Ed Gain la que está generando todo tipo de interrogantes alrededor del homicida que inspiró ‘Psicosis’, ‘El silencio de los inocentes’ y ‘Masacre en Texas’, entre otros.
La tercera temporada de Monstruos, llamada ‘Monstruo, la historia de Ed Gain’ sigue justamente la vida del asesino, sin embargo, hay que decir que el hecho de ser ya uno de las más vistas en la plataforma Netflix, no significa que la crítica haya opinado igual.
Esta vez, los creadores no permitieron que los críticos o la prensa especializada tuviera acceso a los episodios antes de ser lanzados, así que todos tuvieron que aguardar al estreno oficial.
Contrario a los comentarios de las anteriores temporadas, que versaron sobre Jeffrey Dahmer y los hermanos Lyle y Erik Menéndez, en esta ocasión, los expertos tuvieron opiniones diversas sobre el producto final, pero hay que decir que una buena parte se sintió inconforme con lo que vio.
“Sensacionalista y descuidada”, sobre Ed Gain
La crítica ha dicho que esta versión de la historia de Ed Gein no ha sido convincente y es calificado como “descentrada” y “voyeurística”.
Aramide Tinubu, de Variety, dijo que la serie “hace que Ed Gein vuelva a ser mítico pero, a su vez, le quita la textura y la crudeza que se necesitaban desesperadamente para que la serie funcionara”. James Jackson, de The Times UK, mencionó que la serie se constituye en “una inmersión en la oscuridad psicosexual que casi se ahoga en sus propias ambiciones y depravaciones” .
“Monstruo: La historia de Ed Gein es tan sensacionalista y descuidada como los cómics que lee Ed, un producto del sensacionalismo, la provocación y la desinformación”, mencionó Teresa Lacson de Collider.
Por su parte, para Brian Tallerico de RobertEbert.com, la recién estrenada “es una de las producciones más desenfocadas de Ryan Murphy es todo un logro”. En The Guardian,Lucy Mangan no se cohibió y dijo: “Lo único que hace es apelar voyeurísticamente a los instintos más básicos del espectador”.
A quienes si les gustó ‘Monstruo, la historia de Ed Gain’
Joel Keller de Decider, mencionó que la serie “realiza un trabajo efectivo a la hora de presentar al público a un asesino en serie que mucha gente quizás no conozca”. Curiosamente un aspecto que no terminó de convencer a algunos como las escenas de Alfred Hitchcock y la realización de Psicosis, a él le gustaron.
“Monster vuelve a mitificar a Ed Gein y, a su vez, le quita la textura y la garra que se necesitaba desesperadamente para que la serie funcionara”, se leyó en otro comentario de Variety.
“Quizá sea la (entrega de Monster) más oscura hasta la fecha. Charlie Hunnam está espeluznantemente bien (...) Es extremadamente oscura con un elemento casi kitsch de la Segunda Guerra Mundial” mencionó Karina Adelgaard de Heaven of Horror.
Samarth Goyal de Hindustan Times, dijo que Laurie Metcalf, quien interpreta a la madre de Ed, hace una interpretación magistral, así como el protagonista.
Otros comentarios de consumidores habituales de series de este tipo, han considerado que involucrar dos historias más: la de Hitchcock y la del protagonista de ‘Psicosis’, Anthony Perkins, así como las escenas en alemán no aportan y en cambio, si hacen tedioso el relato, e incluso que puede llegar a confundir al quien lo ve.
“De las tres series, esta fue, con diferencia, la más floja. Muy aburrida. Pasaba de la realidad a los hechos, para luego volver a la ficción. Detalles innecesarios que nunca sabremos si son inventados”, mencionó un usuario en Rotten Tomatoes.
¿Quién era Ed Gain, el monstruo de Plainfield?
Ed Gein, el asesino que inspiró Monstruo, nació el 27 de agosto de 1906 y a los 7 años comenzó a vivir en un rancho de Plainfield, Wisconsin. Allí experimentó maltrato de parte de su padre, mientras que su mamá era controladora, estricta y muy religiosa.
Cuando tenía 49 años , más exactamente el 16 de noviembre de 1957, la ferretera del pueblo cercano Bernice Warden, desapareció y las autoridades establecieron que el último cliente había sido Ed, así que fueron a su casa. Allí se encontraron con la escena más dantesca que hayan imaginado, pues el solitario Gein había convertido el lugar en un centro de horror y muerte.
En casa, Ed tenía cadáveres colgando, pieles humanas convertidas en vestidos y máscaras, y los restos de su madre, fallecida una década antes, estaban en la cama. Ed también asaltó tumbas de personas en busca de alguien que se pareciera físicamente a ella.
