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En un comunicado publicado este lunes 16 de diciembre, la Academia Nacional de Medicina, el órgano consultor del Gobierno Nacional en temas de salud y educación médica, expresó su preocupación ante la situación actual del sistema de salud colombiano.
De manera más específica, y en palabras de esa institución, los indicadores actuales reflejan un “deterioro sin precedentes” en aspectos clave como la financiación, la atención a los pacientes y la calidad de los servicios, comprometiendo la salud pública en general.
“El deterioro del sistema de salud está exponiendo a las poblaciones más vulnerables a consecuencias graves, comprometiendo la continuidad de los tratamientos y limitando el acceso a servicios básicos (...) La discusión de la ley de reforma de la salud no puede desplazar la necesidad de intervenir aquellas situaciones que están generando un sensible desmejoramiento de la calidad de vida de los colombianos”, afirmó la institución.
Algunos de los puntos que más preocupan a la Academia son el aumento en un 5 % del gasto de bolsillo en salud, según el DANE, que afecta la protección financiera que ha tenido el sistema de salud de nuestro país.
También se mencionó el incremento de quejas e insatisfacción de los pacientes; la creciente cartera de hospitales, clínicas e Instituciones Prestadores de Servicios de Salud (IPS); el deterioro de las condiciones del talento humano en salud; el desabastecimiento de medicamentos en patologías huérfanas y de alta complejidad; y la demora exagerada en atención de médicos especialistas, citas para exámenes, pruebas paraclínicas y demás procedimientos quirúrgicos.
Por la misma línea, se recordó el cierre de servicios básicos en hospitales y clínicas en atención maternoperinantal, así como la presunta corrupción denunciada en distintos procesos de atención y pagos.
Ante ese panorama, entre las recomendaciones de la Academia se destaca la necesidad de tomar decisiones inmediatas para financiar el sistema de manera adecuada y garantizar la sostenibilidad del sector. Según esa institución, no se trata únicamente de ajustar la Unidad de Pago por Capitación (UPC) para compensar la inflación, sino de adoptar medidas integrales que atiendan otros problemas críticos, como la insuficiencia presupuestal, el desabastecimiento de medicamentos y las demoras en la atención especializada.
La Academia hizo un llamado a priorizar la ejecución presupuestal en áreas como ciencia, tecnología e innovación, así como a fortalecer las acciones de promoción y prevención. Además, insiste en que se deben combatir las irregularidades en la cadena de atención y pagos para frenar la corrupción que afecta al sector.
Por último, la institución hizo un llamado para que los líderes responsables y entes encargados tomen decisiones al respecto, “incluyendo medidas urgentes para financiar y dar solución a estos aspectos que afectan la salud de los colombianos, y no debe ser circunscrito únicamente al aumento de la UPC que compense la inflación en salud y corrija el rezago conocido que viene afectando gravemente las finanzas del sector, sino que también se deben incluir medidas urgentes para financiar y solucionar los otros temas que afectan la salud de los colombianos”.
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