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Curado bebé que nació con VIH

En California se presentó el segundo caso conocido de un neonato curado del sida adquirido hereditariamente gracias a la utilización de retrovirales.

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El Espectador
07 de marzo de 2014 - 08:18 p. m.
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El hecho se registró en California, Estados Unidos, donde, luego del trabajo de parto, un equipo médico suministró una serie de medicamentos retrovirales a una bebé, para comprobar once días después que en la sangre de la niña no queda rastro alguno del virus, según informa CNN.

De acuerdo al mismo medio, aún nueve meses luego de la primera revisión que se hizo a la pequeña infectada debido al contagio de su madre, la enfermedad resulta indetectable en su cuerpo.

Este caso, el segundo que se registra en el mundo, segundo también en los Estados Unidos, representa para la comunidad médica relacionada con los sucesos, difíciles decisiones respecto al sentido que deben tomar las investigaciones que comprueben la funcionalidad real de los tratamientos.

Según, Deborah Persaud, viróloga en el Centro infantil Johns Hopkins y partícipe de los dos sucesos, "esto se tiene que hacer en el entorno de un ensayo clínico, porque en realidad, la única forma en la que podemos comprobar que hemos logrado la remisión en estos casos es quitarles el tratamiento y eso implica riesgos", citó CNN.

El primer caso ocurrió en Mississippi, hace ya tres años, y fue calificado por el grupo de científicos que realiza el seguimiento como una “cura funcional”, lo cual quiere decir que pese a que existe una pequeña presencia del virus esta no es detectable en pruebas sanguíneas y no representa un peligro a largo plazo para su portador.

Según explica Persaud, el tratamiento temprano de estas afecciones en los neonatos sería el factor que permite un control más eficaz. Todos estos avances en el marco del constante riesgo que sufren los recién nacidos por parte de un contagio proveniente de los padres.

Los casos de los dos bebés estadounidenses se suman al llamado ‘Paciente de Berlín’, un hombre que logró curarse del VIH Sida gracias a una de las intervenciones quirúrgicas de mayor riesgo en la medicina: el trasplante de médula ósea.
 

Por El Espectador

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