Identificar los factores desencadenantes del dolor, consultar con un neurólogo para que realice un diagnóstico preciso y manejar por separado las características de la dolencia de cada paciente son los primeros pasos que se deben seguir cuando se diagnostica un paciente con jaqueca.
En entrevista con El Espectador, el neurólogo clínico y neurofisiólogo Sergio Ramírez García, presidente de la Asociación Colombiana de Dolor Craneofacial (Acodoc), fue enfático al asegurar que las denominadas jaquecas o migrañas, de no ser tratadas a tiempo, pueden tener repercusiones graves a largo plazo, desde el deterioro progresivo de la calidad de vida del paciente hasta lesiones a nivel cerebral como infartos migrañosos o cambios vasculares severos.
¿Qué es una migraña?
Es un dolor de cabeza primario, su causa no está determinada completamente. Generalmente se dividen en primarios y secundarios. Los primeros no tienen una causa establecida, mientras que los segundos son lesiones secundarias a tumores, daños vasculares, infecciones o por enfermedades sistémicas asociadas, entre otras causas.
¿Cuáles son las características de la enfermedad?
Es más frecuente en mujeres, empieza entre la segunda y tercera década de la vida. Hay varios tipos y dependiendo de eso se manifiesta. Inicialmente el paciente tiene sensación de hambre, ansiedad, depresión, insomnio, luego empieza a ver puntos negros o brillantes, intolerancia al ruido y a luz y por último un dolor en la mitad de la cabeza.
¿Por qué es más recurrente en las mujeres?
La migraña tiene factores desencadenantes y uno de ellos son los hormonales. Hay pacientes que tienen migrañas antes, durante y después de la menstruación o están relacionadas con la ovulación, dependiendo de los picos de aumento o disminución de estrógenos y progestágenos.
¿Qué clases de migrañas existen?
La migraña con aura se refiere a la sensación de “lucecitas” que ve el paciente, hormigueo o adormecimiento del cuerpo, dificultad para hablar y alteraciones de la visión. El otro tipo es la migraña sin aura, se presenta con sensación de intolerancia a la luz y al ruido. Existen otros subtipos dependiendo del tiempo de duración del aura, que pueden ser más prolongados. Hay algunas que se refieren a algún territorio vascular específico y también existen otras migrañas que paralizan el cuerpo, como la parapléjica.
¿Qué factores desencadenan una migraña?
Para cada paciente hay uno o varios factores desencadenantes. Uno de los más importantes es la parte hormonal, privación de sueño, ayuno y estrés. Algunos alimentos también pueden desencadenar la dolencia, como la soya, licor, condimentos, derivados lácteos y el cigarrillo.
¿Hay algún factor genético?
Sí existen unos cromosomas relacionados con la migraña, el 19 y el 21, justamente ese factor genético es diferente en cada persona. Está demostrado que la mayoría de la descendencia de los pacientes migrañosos puede presentar la enfermedad de forma hereditaria.
¿Qué consecuencias trae para un individuo sufrir una migraña de manera prolongada?
Cuando la migraña es persistente puede producir un deterioro en la calidad de vida de la persona; segundo, puede haber lesiones a nivel cerebral, como infartos migrañosos, y además con el tiempo desencadenar en cambios vasculares con la presencia de factores de riesgo (pacientes que fuman, son hipertensos, tienen colesterol y triglicéridos altos), hasta presentarse cambios cognoscitivos de memoria y lesiones vasculares.
¿Qué deben hacer las personas que presentan este tipo de dolencia?
Consultar a un neurólogo para que haga el diagnóstico correcto, disminuir la presencia de factores desencadenantes, hacer una profilaxis farmacológica, además de atacar con analgésicos antiinflamatorios el episodio agudo con el fin de disminuir la frecuencia y la intensidad de los dolores.
¿Cuál es el tratamiento que deben seguir?
Dentro de un mismo paciente podemos encontrar episodios de migraña leves, moderados y severos. En relación con eso se hace la profilaxis y el tratamiento analgésico adecuado. También es importante detectar a tiempo la presencia de otras enfermedades, que unidas a la jaqueca, deben tener un tratamiento integral; por ejemplo, migraña-epilepsia, migraña-hipertensión, migraña-rinitis.
Tratamiento integral contra la jaqueca
La migraña o jaqueca no es operable. Aunque existen unos procedimientos que son estimuladores del sistema nervioso periférico empleados en pacientes con migraña refractarias, es decir, que tienen un cuadro crónico y no responden a ningún tratamiento. La intervención consiste en introducir un aparato especial en uno de los sitios estratégicos del cerebro que estimulan los nervios y producir un disparo de manera permanente que bloquea el dolor para disminuir su frecuencia e intensidad.
Sin embargo, para eso es necesario realizar antes una profilaxis farmacológica, osea, durante un tiempo prudencial de unos 6 meses se debe emplear un medicamento con el propósito de disminuir la frecuencia e intensidad de los dolores y si no da el resultado esperado, es necesario contemplar la opción de cambiar de tratamiento o recurrir a la cirugía. También se aconseja mirar en conjunto otras dolencias que afecten al paciente, como cuadros de hipertensión, triglicéridos altos, depresión o ansiedad.