Así mismo, el Informe señala que se podría padecer migraña o vértigo, como consecuencia de que la luz de esos bombillos podría influir en el tallo cerebral.
"El tallo cerebral es una estructura muy importante porque controla todo el organismo y también a partir del tallo cerebral hay una relación grande con el control del equilibrio. No es cuánto tiempo me exponga yo al estímulo, sino que tan intenso es ese estímulo que logre disparar mi cerebro", señaló el médico neurólogo Michel Volcy, en declaraciones a Noticias Caracol.
Según el doctor Volcy, esas bombillas, las cuales contienen en su interior una cantidad mínima de mercurio, emiten una luz con una intensidad y una onda bastante alta, la cual lograría penetrar fácilmente en el tejido subcutáneo, lo que provocaría una irritación en la zona afectada, así como el deterioro de la misma.
De igual manera, hay quienes sostienen que la cantidad de mercurio en los bombillos sí podría afectar la salud de quienes se expongan al mismo, en caso de que se rompa el cristal, toda vez que al romperse la lámpara fluorescente, se expandiría el gas.
Expertos recomiendan que en caso de romperse el bombillo, lo mejor es no recogerlo directamente con las manos, sino utilizar algún tipo de herramienta para llevar a cabo la labor, o al menos, protegerse con guantes.
Sin embargo, el Gobierno Nacional aún no se ha pronunciado respecto al tema y se mantiene en la postura de cambiar todos los bombillos de luz amarilla en el territorio nacional, precisamente a los ahorradores.
A partir del año 2010, se espera que en todos los hogares colombianos se utilicen este tipo de bombillos o tubos fluorescentes.