Ayer, 5 de diciembre, se conoció una carta enviada el 25 de noviembre por Diego Fernando Díaz, representante legal de Audifarma, a la Superintendencia de Sociedades. En ella, el que es uno de los gestores farmacéuticos más importantes del país solicitaba nombrar a Díaz como el promotor del proceso de reorganización empresarial.
Audifarma emitió un comunicado durante la mañana de este viernes, 6 de diciembre, en lo que es el primer pronunciamiento oficial sobre el tema. “Informamos a todos nuestros clientes, proveedores, colaboradores y grupos de interés que, tras evaluar múltiples alternativas y realizar un arduo esfuerzo por superar los desafíos actuales, la empresa ha tomado la decisión de solicitar ante la Superintendencia de Sociedades su admisión al trámite de reorganización empresarial bajo la Ley 1116 de 2006 en Colombia”, se lee en el documento.
La empresa asegura que durante los últimos meses ha enfrentado “retos significativos en el entorno económico y de mercado”, lo que los habría llevado a solicitar la reorganización empresarial. Esto, afirman, “permitirá preservar la empresa como fuente de empleo y proteger los intereses de todos los actores involucrados”.
Dos meses atrás, la farmacéutica terminó con el acuerdo de entrega de medicamentos que tenía con Nueva EPS, la prestadora de salud más grande del país, con 11 millones de afiliados. La decisión se tomó por una diferencia en las cifras de cartera con la EPS, pues Audifarma reclamaba el pago de $651.000 millones, cifras que no coincidían con las deudas que Nueva EPS afirmaba tener.
Antes de conocer el comunicado, la Superintendencia de Sociedades había confirmado a El Espectador la existencia de la solicitud, diciendo que “no se ha adoptado ninguna decisión”. Como parte de la solicitud, Audifarma debe presentar documentos que la soporten ante la Supersociedades. Luego de revisarlos, la entidad decidirá si se da inicio a la reorganización o se rechaza la solicitud.
“El acogimiento a la Ley 1116 de 2006 representa un paso fundamental hacia la recuperación y estabilización financiera de Audifarma, permitiéndonos así optimizar recursos y mantener la dispensación de medicamentos, con el propósito de seguir acompañando a los pacientes en el camino hacia su bienestar”, expresa el gestor farmacéutico en el comunicado.
El proceso de reorganización de la empresa, una vez sea aprobado, podría tomar unos seis meses. De momento, no debería generar ningún cambio en los servicios que presta la entidad. “Continuaremos cumpliendo nuestros compromisos con empleados, clientes, proveedores y aliados comerciales y trabajando en el plan de reorganización para fortalecer la compañía”, apuntan.
¿En qué consiste el proceso de reorganización empresarial?
Si la Superintendencia de Sociedades decide aceptar el proceso de reorganización solicitado por Audifarma, se deberá nombrar un promotor. Esta persona sería la encargada de supervisar este proceso.
Supersociedades asegura que el proceso toma alrededor de seis meses. Durante este tiempo, la empresa deberá elaborar un plan de reorganización que le permita alcanzar la estabilidad financiera. Ese plan se conoce como Acuerdo de Reorganización.
Una vez presentado, será revisado por la Supersociedades y negociado con los deudores o acreedores de la empresa, con el fin de que se de cumplimiento, por ejemplo, a los pagos que necesita Audifarma para recuperar su solidez financiera. Cuando el acuerdo sea aprobado, continuarán con la ejecución del mismo.
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