Aunque el juego en línea lleva entre nosotros desde la década de 1990, la verdad es que su popularización y masificación no se dio hasta la segunda década del siglo XXI. Si hay que señalar a una consola doméstica que lo llevó a otro nivel, esa fue la Xbox 360 de 2006.
Aun así, desde DOOM (1993) y el juego en computador es posible conectarse por medio de internet para jugar con otras personas en otra parte del mundo. Es tanta la fama de este modo de juego que se puede explicar el éxito de títulos como Fortnite o League of Legends.
Es una manera de conectar jugadores alrededor de una misma afición, así como lo hace una feria o un evento deportivo. Por eso internet se ha convertido en el sitio de reunión de millones de usuarios, porque andan en busca de una conexión y una comunidad iguales a ellos.
Sin embargo, hoy es difícil e inaceptable obviar los riesgos que implica jugar de manera online cuando internet no es un sitio del todo seguro. Especialmente para menores de edad que son recurrentes en lobby de entregas o en salas de espera aguardando por iniciar una partida.
Según Statista, el 70% de los niños entre los 6 y los 12 años juegan videojuegos, y ocho de cada 10 jóvenes (entre los 15 y los 19 años) han visto o jugado juegos en línea al menos una vez. Entonces ¿Qué tan peligroso es para los niños y niñas jugar videojuegos en línea?
¿Qué están haciendo los niños en internet?
De acuerdo con Kaspersky, el mundo de los videojuegos ocupó el primer lugar en popularidad de búsqueda en YouTube entre los niños, 27,29% de todas las búsquedas. Este contenido es aún más popular que la música, al menos entre los menores de edad.
Además, con respecto a las búsquedas en Google, el Gaming ocupó el segundo lugar en popularidad después de las plataformas de transmisión en vivo como Twitch, Kick o TikTok. En concreto, los juegos representaron el 13,27% de las búsquedas de niños en Google.
Pasando a los títulos más populares, Minecraft, Brawl Stars, Fortnite, Roblox y Sprunki siguieron en la cima de la lista, TODOS con al menos un modo de juego online. Y no se trata de una moda pasajera, pues estas entregas llevan en ese lugar de privilegio casi que desde su año de lanzamiento, a excepción de Sprunki que es una propuesta reciente.
¿Cómo proteger a los niños que juegan en línea?
Al ser lugares virtuales tan concurridos por los más pequeños, son propensos a utilizarse como plataformas de lanzamiento para estafas. Muchas veces la promesa de una skin (personaje) o monedas a mitad de precio es tan solo una excusa para robar dinero o datos personales y sensibles de las tarjetas de crédito registradas en el juego.
Pasando a otro punto crítico, Discord, una plataforma utilizada en muchas sesiones de juego en línea para chatear (sea con voz o palabras) con otras personas, es idónea para almacenar actividad maliciosa. Desde un virus, hasta un rastreador de información como la dirección del computador desde el que el niño está conectado jugando.
En estos casos siempre será recomendable acompañar a los niños y niñas en todo este proceso. No como un policía o vigía del videojuego, sino como una acción para aprender como se juega en línea y eso qué puertas le deja abiertas a ciberdelincuentes listos para atacar cualquier vulnerabilidad.
Otros riesgos y otras recomendaciones
Otro de los problemas más comunes a la hora de jugar videojuegos online es el ciberacoso. Las partidas con desconocidos en internet pueden ser lugares hostiles para muchos niños, especialmente para las niñas que en ocasiones son tachadas de menos habilidosas para los juegos simplemente por el hecho de ser mujer.
El contenido inapropiado también puede ser otro inconveniente a la hora de conectarse para una partida online. Sean malas palabras o connotaciones sexuales, es el tipo de información al que no debería estar expuesto un niño y mucho menos en internet.
La enseñanza siempre se presume como el mejor camino, y aunque no todos los padres o tutores puedan estar presentes, siempre será una opción enseñarle a los menores de edad cómo identificar cuando un espacio virtual (un juego en línea) no está generando efectos positivos en sí mismo.
Al mismo tiempo, limitar el nivel de interacción en los videojuegos online puede evitar el contacto con extraños. Al menos que no puedan ver ni escuchar la voz de los niños y niñas, puede asegurar, en cierta medida, la reducción de los riesgos que implica jugar títulos por medio de internet.