Los desarrollos tecnológicos han permitido descubrir ya la existencia de decenas de sistemas solares en las cercanías de nuestro sistema solar. En ellos se han podido detectar la presencia de planetas, lo que indicaría la posibilidad de que allí se tienen espacios para que se desarrolle algún tipo de vida tal como lo tenemos en nuestro sistema solar, en el planeta que llamamos Tierra.
Sabemos que en el planeta Marte no se ha hallado vida, tal vez no se encuentre, pero el haber encontrado condiciones favorables para que se de en alguna forma, gracias al agua descubierta en los polos y que corría por su zona ecuatorial allí hace millones de años, elevaría considerablemente las posibilidades de tenerla en los sistemas solares ya confirmandos: de una decena de planetas -en nuestro sistema solar-, encontrar que en dos desarrolle el tema de cuerpos vivos, no deja las posibilidades muy bajas para que se de en otros.
Claro esta que esas condiciones no se dan tan fácil, temperaturas, presiones, velocidades y otras más circunstancias hablan de pocos casos de éxito en miles de millones de sistemas solares, pero debemos pensar que al mirar el Universo, encontramos que los cuerpos celestes son similares y que estos se hallan sin distribución por doquier, lo que ha permitido al menos a la Ciencia el estudiar seriamente la eventualidad de que en alguno de esos planetas se deben tener vida y en una menor cantidad, existan algunos evolucionados con niveles de inteligencia que les permita poder transmitir al Cosmos que existen.
Nosotros, hablando como civilización que ha alcanzado a emitir señales de radio suficientes para que naveguen por el Cosmos, ha hecho de esto un caso involuntario que cuenta que existimos y que podría escuchar "alguien" allá afuera, dando una prueba de la vida y contar que no deseamos estar solos al no ocultarlo. Así mismo, no será raro que en un futuro no muy lejano, con la ayuda de la radioastronomía, la civilización humana escuche las transmisiones de otro planeta, de un sistema solar vecino, en la que nos enteramos de lo que ellos hacen.
También querría decir esto, que alguien puede estar observándonos y no mostrarse, pero ante este hipotético hecho, la humanidad en general no puede esperar a que ellos se presenten, la tarea será la de continuar e intentar también observar el firmamento para encontrar la vida y porque no, contactar a los que sí lo deseen hacer.
*Director del Observatorio Astronómico de la U. Sergio Arboleda