Hace un par de meses, Daneidy Barrera, conocida como Epa Colombia, empezó a publicar en sus redes sociales fotos con la futbolista profesional Diana Celis, quien juega en La Equidad. Más adelante vino un video en Instagram en el que salía la pareja, y minutos después una grabación en vivo hizo la revelación oficial: Epa Colombia y Celis eran novias y querían hacer público su amor.
Barrera se hizo famosa el año pasado porque uno de sus videos, como youtuber, se volvió viral en época de Copa América con el cantico de “eh eh epa Colombia”, que hasta el presidente Juan Manuel Santos retuiteó en su cuenta de Twitter. Celis, también reconocida en el mundo deportivo, es un poco más tímida y de pocas palabras pero no oculta su seguridad y cariño hacia Daneidy, a pesar de las constantes críticas e insultos que la cuestionan por estar con una “guisa” o “ñera” o por ser lesbiana.
Este jueves, en la W Radio, ambas hablaron durante una hora sobre los nueve meses de relación y revelaron cómo salieron del clóset en un país donde la población LGBTI sigue peleando por la igualdad. Se conocieron poco antes de que Epa Colombia se volviera famosa por sus videos en el que habla de cosas cotidianas, solo había tenido un novio antes y en su casa nunca había presentado a una mujer como su pareja. En esa época era estudiante del Sena.Un día Barrera sentó a sus papás en la cama y sin dudarlo les contó que había una “amiguita” que le gustaba mucho y con la que se sentía diferente. “Yo la apoyo, lo que ustedes quieran”, le dijo su papá, quien es administrador de empresas. Su mamá, quien tiene tres locales de jeans y un poco más sorprendida por la noticia, también le brindó su soporte, y ahora es ella “quien ama a Diana Celis”.
Solo Dios puede juzgar nuestra relacion, me haces la mujer mas feliz del mundo celos @diana.celis5
“Nuestros papás siempre nos apoyaban”, agrega Celis, quien al principio no quería hacer su pública su relación por miedo a la discriminación. Sobre su día a día, la jugadora cuenta que es un poquito celosa. “Me da mucha rabia porque a veces vamos por la calle y los hombres son muy morbosos con ella y no respetan. Le morbosean todo”. Luego, ambas se dieron un beso frente a los micrófonos y cámaras de la emisora la W.La relación empezó porque Diana le coqueteaba a Daneidy, pero esta última quien finalmente le pidió el “cuadre”. Desde entonces no se pierde un partido de fútbol en el que juegue su novia. “Yo soy el polo a tierra de ella porque es un poquito loquita. Ella tiene una parte muy tierna, lo consiente a uno mucho, está muy atenta. Siempre me acompaña a los partidos”, dijo Celis sonriendo. Reconocen que las critican mucho, pero “no ponen cuidado”. Y ante los constantes intentos de hackear las cuentas en redes sociales de Epa Colombia, ella se tuvo que poner en contacto con Facebook para pedir un perfil oficial.
¿Es difícil ser gay en Colombia? “para mí no, pero para muchas personas sí. Hay muchos gais que viven tapados, por la mamá o la familia. Los invito a que salgan del clóset, que sean libre, apoyo a los LGBTI porque sé qué es que te digan ‘tras de guisa lesbiana’. Los invito a que sigan adelante con sus metas. Quién dice que una lesbiana no pude ser famosa y que Dios no la bendice. Soy famosa, soy lesbiana y Dios me ha bendecido, porque ahora como bien. Ya no vivo de los comentarios. Dios me ama así”, afirmó enfáticamente Epa Colombia.Barrera, a quien le gustaría ser comediante, vive en el Tunal en Bogotá y ya planea independizarse porque en su casa viven muchas personas y quiere tener espacio para grabar sus videos sin interrupciones. Su vida ha cambiado desde aquel video, gana más dinero y quienes la rechazaron en un principio para campañas de publicidad ahora la llaman pidiéndole firmar contratos. Ella les pide el triple de lo que antes ofrecían. Se operó los senos y el abdomen, y posó desnuda para Soho, uno de sus sueños. A los 15 años consumió toda clase de drogas, admira a Lina Tejeiro y a Sara Uribe y está segura de que la fama se acaba. Pero mientras tanto defiende que sus videos son entretenimiento y que nadie la puede juzgar, excepto Dios.