Hay fórmulas caseras de Coca-Cola circulando en la web pero, obvio, nunca la compañía las reconoció ni siquiera como cercana a la que se vende en el mercado, que sigue guardada bajo setenta y cinco llaves. Pero ahora, dos británicas, Kate Rich y Kayle Brandon, que administran el bar de un cine cultural en Bristol, Inglaterra, aseguran haber hallado una muy similar a la verdadera.
Ambas rechazaban vender Coca-Cola porque están en contra de las prácticas económicas y ambientales de la empresa que produce la bebida más popular del mundo. Así que decidieron hacer su propia coca. Luego de varios meses de experimentar, lo lograron. Ahora también venden un kit para el que quiera producir en casa su propia gaseosa, en un intento por quitarle adeptos a la multinacional.
“No fue fácil. Ahora la fórmula se publica pero cuando nosotras la buscamos, no estaba en ningún lado, hasta que la encontramos”, señaló Brandon al diario Crítica de la Argentina. “Armamos una suerte de laboratorio en mi casa, tuvimos que aprender de química, de ciencia, de emulsionantes, hicimos muchísimas pruebas hasta que de pronto dimos con la fórmula”, dijo.
Todo empezó hace casi un año cuando las muchachas, dos militantes del movimiento Hágalo Usted Misma, cuyas siglas en inglés son DIY (Do it yourself) y que fomenta una filosofía anticorporativista, decidieron que en su propio negocio, el bar del cineclub Cubecinema, no iban a vender botellitas de Coca-Cola. Pero los clientes demandaban ese refresco, marca instalada en la cima del paladar y la mente de los consumidores.
Las descubridoras del secreto no quieren revelar cómo encontraron la fórmula. Consiguieron una receta similar e hicieron una coca artesanal. “No tiene exactamente el mismo gusto ¡Pero es más rica que la verdadera!”, dicen ellas, muy seguras de su invento.