La selección española de fútbol Sub-19 reconquistó el título europeo de la categoría en un partido donde remontó en la prolongación hasta ganar 3-2 este lunes a la República Checa, uniendo este éxito al conseguido recientemente por la Sub-21 en la cita continental.
Hasta ahora, ningún país había conseguido el mismo año un 'doblete' de los Europeos Sub-21 y Sub-19, lo que confirma la buena salud de las categorías inferiores de la 'Roja', vigente campeona absoluta mundial y europea.
Los españoles rozaron el desastre en varias ocasiones, especialmente en la prórroga, donde Patrik Lacha (97) había adelantado a los checos con el 2-1, pero Paco Alcácer, en la segunda mitad del tiempo añadido, logró una emocionante remontada (108 y 114).
En los primeros noventa minutos, la República Checa también se había adelantado, por medio de Ladislav Krejcl en el 51, y mantuvo su ventaja hasta el 85, cuando Jon Aurtenetxe consiguió un tanto salvador en el 85, que obligaba a disputar la prórroga.
Para España, se trata del quinto título desde que en 2001 se instauró oficialmente el formato actual del Europeo Sub-19 y el séptimo si se tienen en cuenta anteriores torneos, que se consideran precursores o antecedentes del actual.
Desde 2002, en el primero de los títulos españoles en la nueva etapa de la competición, el país ha estado en la final en siete de las diez ediciones, la última hace un año en Francia, donde cayó en el último partido ante el equipo anfitrión en Caen (2-1).
La República Checa, por su parte, queda en puertas del que hubiera sido su primer título bajo el formato actual, aunque en los anteriores torneos había conseguido coronarse en 1968, con la extinta Checoslovaquia.
Después de haber terminado líder del grupo B y de aplastar 5-0 a Irlanda en semifinales, los españoles disputaron un partido lejos de su mejor nivel y se vieron en serios apuros ante un equipo checo muy ordenado y peligroso en los contragolpes.
Tras una primera mitad equilibrada y donde la República Checa ya avisó de su potencial, el primer gol llegó en el 51, cuando Krejcl batió a Edgar Badía con un certero disparo raso desde la frontal del área.
Paco Alcácer y Pablo Sarabia intentaron igualar insistentemente, pero el tanto del 1-1 llegó en el 85, cuando un disparo cruzado de Rubén Pardo fue tocado por Artenetxe en el área pequeña, enviando el balón a la red.
En la prórroga, los checos volvieron a cobrar ventaja, de nuevo en una gran jugada de Krejcl, que se fue por velocidad, centró al punto de penal y allí, libre de marca, Patrik Lacha firmó el segundo para los suyos en el (97).
Y ahí España resurgió de sus cenizas, de la mano de Paco Alcácer, una de las promesas del Valencia, que recibió primero (108) en el área un gran pase de cabeza de Álvaro Morata y luego, en el tanto decisivo, recibió de Rubén Pardo, controló con el pecho y batió a Tomas Koubek en el 114.
España pudo celebrar además el éxito de Morata, de la cantera del Real Madrid, como máximo anotador del torneo, con un total de seis goles.