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Alexandra Waterbury, de 19 años, demandó al ballet de Nueva York y a su exnovio Chase Finlay porque asegura que la compañía generó un “ambiente de fraternidad” en la divulgación que hacía Finlay, sin su consentimiento, de fotos y videos en los que aparecía desnuda.
El joven, de 21 años, habría difundido el contenido con otros compañeros por un grupo de Whatsapp. El pasado 15 de mayo Waterbury se enteró que el joven la grababa mientras tenían relaciones sexuales.
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Al confrontarlo confirmó que la primera foto que su expareja hizo pública fue hace aproximadamente un año. Después de eso, decidió abandonar el ballet de Nueva York para dedicarse al modelaje.
En la denuncia presentada en la Corte Suprema de Manhattan, Waterbury señaló que en una conversación por Whatsapp entre su expareja y un donante de la compañía planeaban violar a varias bailarinas.
“El ballet de Nueva York alienta a sus bailarines a ignorar la ley y violar los derechos básicos de las mujeres”, dijo la exbailarina a The New York Times.
El establecimiento aseguró que la denuncia de la joven “no tiene bases”, pues señalaron que ellos actuaron de inmediato cuando fueron informados del caso. Además, dijeron que fue inapropiada la conducta de los bailarines que participaron en la divulgación del contenido intimo.
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En Colombia quien “se apodere, modifique o utilice información personal en perjuicio del titular o de un tercero”, puede pagar una pena de 1 a 4 años en cárcel. En caso de que el contenido sea difundido por redes sociales la persona afectada puede interponer una tutela para exigir que se elimine apelando a los derechos de buen nombre, la honra y la dignidad humana.