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Fernando 'Pecoso' Castro: "El Gobierno está acabando con el fútbol"

El técnico del Deportes Quindío explica que la ley es permisiva y que a raíz de ello, el fútbol profesional está quebrado y en riesgo de desaparecer.

Juan Diego Ramírez Carvajal
11 de abril de 2011 - 01:30 a. m.

Cuando vestía la camiseta del Once Caldas en 1972, Fernando Pecoso Castro, aquel marcador de punta, recibía su sueldo de una forma poco ortodoxa: “Me daban un talonario y tenía que salir a las calles a promocionar un carro que rifaba el club… y de ahí salía mi sueldo”, recuerda el hoy estratega del Deportes Quindío.

Con esa situación todavía en sus retinas, el técnico cafetero le aseguró a El Espectador que el fútbol no ha cambiado en 40 años y explicó las razones por las cuales sus dirigidos no se presentaron a jugar el pasado sábado ante Millonarios en El Campín, en una penosa situación que resultó en el inesperado debut de un equipo Sub 20.

¿Qué piensa de la situación que se vivió el sábado pasado?


Yo estaba en mi casa viendo el partido y apenas vi salir a estos muchachos me dio tristeza. Ellos, sin embargo, mostraron profesionalismo, perdieron con las botas puestas. Pero no tienen la culpa de que se presente esto, qué falta de respeto con el público, por ejemplo. Ellos pagaron por algo y fueron a ver otra cosa. Es como si alguien paga un tiquete para ver una obra de teatro y salgo a actuar yo.

¿Hay que llegar a estos extremos para que se haga algo?

Lastimosamente. En 41 años que llevo en el fútbol me ha tocado vivir muchas cosas y mi única conclusión es que esto no ha cambiado en nada. De 1970 para acá han cambiado dirigentes, pero los problemas siguen siendo los mismos.

¿Quiénes son los responsables?

Hay muchos y mientras no se tomen medidas el fútbol se va a acabar. Somos responsables los dirigentes, los jugadores, el público, el Gobierno, los árbitros y nosotros los técnicos también. Todos somos responsables por no reunirnos y llegar a acuerdos para que situaciones como las del sábado no se presenten.

¿Y por qué no lo hacen?

Porque en la Dimayor no lo escuchan a uno, a nadie. Esas opiniones allá no importan, como que a nadie le interesa que esto cambie. Deberían abrir un espacio para ver cómo mejoramos el fútbol. Estamos en una crisis y todos la ignoran. Sobre todo hay una crisis de valores humanos, no hay honestidad, sentido de pertenencia, todos buscan cómo sacar su tajada. Todos van por distintos caminos.

¿Y por qué se pone en evidencia precisamente a través del Quindío?

Esto no es un problema del Deportes Quindío, ¿acaso somos notros no más y es un tema actual? Cuando jugaba en 1972 en el Once Caldas me dieron un talonario de boletas de la rifa de un carro que tenía el club y de ahí cobraba mi sueldo. No es tan diferente a lo que se ve ahora. Esto es un campanazo a todos para que cambien las cosas. Pero como la solución no está en mis manos…

Si la tuviera...

Lo primero es hacer clubes con socios, que tengan dolientes, acá en Colombia no hay, los hay muy pocos. Y hay que reestructurar. Esto está muy mal dirigido, todos sabían que esto iba a pasar y tal vez por eso se inventaron el torneo Sub 20, porque contaban con que en algún momento estos chicos, sin contrato, sin nada, tendrían que reemplazar a los de la profesional. ¿Por qué se da esto?, porque está mal administrado todo.

¿Se refiere a la Dimayor?


Prefiero referirme a los dirigentes en general. Sé que hay deficiencias de la Dimayor, por no tener una reglamentación seria, por no imponer una estructura. Pero no quiero individualizar el problema porque o si no me multan con fechas y plata o algo me pasa, entonces mejor callo.

¿Qué responsabilidad tiene Hernando Ángel, presidente del club?

Yo sólo le hablo a la junta directiva y les digo que tomen esto por el lado bueno. Y todos, en cabeza de Hernando Ángel, entienden porque estamos reclamando algo legítimo.

¿Cómo está realmente la situación en la institución cafetera?

Nos deben ya cuatro meses, con el que acaba de entrar. Esta situación nos lleva a exigir al menos dos meses. Pero la junta directiva no tiene de dónde pagarnos. Este equipo depende de los jugadores que venda, pero como acá en el país no exigen nada de pagos de contado, entonces al equipo le deben plata de la venta de Diego Chará y Alexánder Mejía, al Tolima y Once Caldas respectivamente.

¿Entonces van a seguir en ‘paro’?

Nosotros seguimos trabajando. Y si los jugadores dicen que no van a jugar porque no les han pagado, pues estoy con ellos. Claro, no falta el dirigente que ve esto como sindicalismo, pero es que los jugadores se asocian y están reclamando como trabajadores de una empresa llamada fútbol profesional que no cumple derechos. Y Ahora resulta que son culpables. Esto es una alarma, y ojo que el Quindío no está en la peor situación.

¿Cuáles equipos están en la peor situación?

Caso de los jugadores del Once Caldas, que también ya amenazaron con no jugar en Copa, que tienen un déficit de $12.000 millones. Quindío está bien. Este equipo con un jugador que venda queda libre, no ve que con $120 millones ya se paga la nómina. Con lo que le pagan a Quintabani en Júnior nos pagan a todos nosotros. ¿Y por qué están así los equipos?, porque no hay patrocinadores ¿Por qué no los hay?, porque patrocinar ya no es rentable, pues la gente no va al estadio por los vándalos, por la inseguridad, por la ausencia del Gobierno. Si bien la nueva ley propone muchas cosas buenas, por ahora el Estado es muy permisivo. El Gobierno está acabando con el fútbol.

Por Juan Diego Ramírez Carvajal

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