La Federación Internacional de Fútbol (FIFA) negó este jueves que se haya decidido que el estadio de Maracaná de Rio de Janeiro albergue la final del Mundial de fútbol de 2014, tal y como afirmaron medios brasileños citando a un alto responsable de la organización.
"Ninguna decisión oficial ha sido tomada", dijo a la agencia AFP el director de comunicación de la FIFA, Nicholas Maingot, que precisó que la sede de la final se conocerá tras la reunión del Comité Ejecutivo de la FIFA que tendrá lugar en Zurich el 20 y el 21 de octubre.
Varios medios brasileños atribuyeron el anuncio de la sede de la final al secretario general del organismo, Jerome Valcke.
Según ESPN Brasil, Valcke dijo que "la final ya es evidente, aunque pensamos que no hay muchas ciudades que podrían acoger la decisión. Ese estadio (Maracaná) ya recibió la final 61 años atrás. Lo que tenemos que decidir ahora es (dónde serán) las semifinales y el juego de apertura".
De acuerdo a una transcripción de la entrevista con medios brasileños que la FIFA proporcionó a la AFP, lo que Valcke dijo fue: "es bastante obvio donde debería jugarse la final. No está confirmado, pero si lo piensas, no hay muchas ciudades en Brasil donde debería jugarse la final".
"Hay un estadio en Brasil, puedes imaginar donde debería jugarse la final, donde se jugó 61 años atrás", señaló, según la transcripción de la FIFA, agregando que "ahora queda decidir donde se jugarán las semifinales, el tercer lugar".
"Esos son los partidos principales en los que estamos trabajando: la inauguración, la final, el tercer lugar y las semifinales. Y entre las doce ciudades (sede), tenemos que decidir".
"En octubre anunciaremos oficialmente donde se jugarán los partidos", concluyó, según la FIFA.
La cita en Brasil se jugará entre el 12 de junio y el 13 de julio de 2014, según confirmó esta semana el mismo Valcke.
Aunque Sao Paulo es la ciudad que más ha sonado para albergar la apertura, también figuran Brasilia, Belo Horizonte y Salvador para acogerlo, mientras que para la final siempre sonó Maracaná.
El templo del fútbol brasileño, en el que Uruguay se coronó campeón mundial en 1950 al vencer de atrás 2-1 a Brasil en el último partido del torneo, en el célebre 'Maracanazo', está siendo remodelado a un costo de más de 660 millones de dólares con miras al Mundial de 2014.
A tres años del Mundial, Brasil aún presenta importantes atrasos en la habilitación de sus estadios -incluyendo el de Sao Paulo que no estará listo ni siquiera para la Copa Confederaciones de 2013- aunque la FIFA dio esta semana un espaldarazo al comité organizador y confía en que todo estará listo a tiempo.
"La semana pasada tuvimos todas las confirmaciones sobre los estadios y ellos deben estar listos para finales de 2013. Sao Paulo estoy pensando más a comienzos de 2014", explicó el responsable.
Las autoridades de la FIFA se encuentran en Rio de Janeiro para participar en el sorteo que definirá el calendario de las eliminatorias mundialistas, a realizarse el sábado.