Holandés es hospitalizado en China tras esperar 10 días por una cita online

Alexander Cirk esperó por diez días, en un aeropuerto de China, a la mujer que había conocido hacía dos meses por internet. /Weibo

Más de 20 horas tuvo que viajar Alexander Cirk para llegar de Holanda a Hanou, en China, donde vive Zhang, la joven con la que sostenía una relación desde hacía dos meses, luego de conocerla en una aplicación para conseguir parejas en línea.

Tras el largo viaje, Cirk tuvo que esperar más. Exactamente 10 días, en los que vivió en el aeropuerto comiendo sopas instantáneas, mientras no perdía la esperanza de que la mujer de 26 años apareciera, ya sin el suficiente dinero con el cual devolverse a su país.

El hecho llamó la atención de las autoridades chinas que llevaron al hombre a un centro médico, ya con problemas en el corazón y los riñones, debido al decaimiento que presentó tras pasar la semana y media sin la debida alimentación y bajo las mínimas condiciones de vida al dormir en las sillas del aeropuerto.

Su caso se dio a conocer luego de que su imagen decaída se compartiera masivamente en redes sociales, y luego de llamar la atención de los medios locales que documentaron su paso por el aeropuerto y la historia de amor que lo llevó a viajar al otro lado del mundo.

La joven mujer no se había tomado en serio el viaje de Cirk. Él le había prometido que viajaría en un año, y lejos de pensar que el hombre se encontraba en camino a su encuentro ella viajó a otra ciudad, a Zhengzhou, donde se realizó un procedimiento estético. 

Durante el procedimiento y el proceso de recuperación la mujer no recibió los mensajes que el holandés de 41 años, que viajó desde Ámsterdam, ni la foto de lo que al parecer era el tiquete del vuelo, con el que hacía referencia a su visita al país asiático.

Solo fue hasta que el canal local Hunan TV contactó a Zhang que ella supo la travesía que vivió Cirk. Aseguró que al comienzo creyó que se trataba de un chiste. "Habíamos avanzado en nuestra relación, pero después me pareció que era un chico algo insensible. Un día me envió repentinamente una foto de unos billetes de avión, pero pensé que era una broma. No me dijo nada más".

Al final la pareja pudo conversar por teléfono, pero no pudieron encontrarse debido a que la joven continuaba en la ciudad a 900 kilómetros de Hanou y el holandés fue enviado a su país el pasado lunes, aunque él aseguró a la prensa local que tras lo ocurrido su relación se fortaleció y que el siguiente reto era superar el malentendido con la joven china.