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El caso PL, como fue llamado en el expediente judicial, parecía que estaba cerrado cuando en mayo de 2015 fue condenado a tres meses de prisión y a pagar una multa de $3.600 dólares. ¿La razón? El hombre de 69 años se había masturbado en Catania, en Sicilia, frente a los ojos de los estudiantes de una universidad.
El abogado defensor intentó una vez más que los actos de su cliente fueran revisados, así que llevó el caso a la Corte Suprema de Italia –La Corte di Cassazione. El alto tribunal se pronunció en junio, pero la publicación de la decisión se conoce hasta ahora.
La Corte estableció que masturbarse públicamente no es un crimen. Solo es delito cuando se hace frente a menores de edad, y la pena que se debe pagar puede ser hasta de cuatro años y medio.
Con estos argumentos, el alto tribunal anuló la sentencia de PL, por la que incluso las cortes locales evaluarán una multa administrativa de hasta $33.912 dólares.