Durante dos días la Universidad Javeriana, en Bogotá, fue el escenario de un encuentro científico en el que se presentaron algunos de los proyectos colombianos más novedosos, que le permitirán al ser humano mejorar su calidad de vida en los próximos años. Al encuentro asistieron reconocidos médicos nacionales y extranjeros, quienes dieron a conocer las últimas tendencias en biotecnología.
Uno de los proyectos que más llamaron la atención fue el desarrollo de una silla de ruedas que funciona con impulsos cerebrales, pensada para aquellas personas que han sufrido algún accidente cerebrovascular, como una trombosis, que quedaron incapacitadas y necesitan valerse por sí mismas.
Los autores de esta iniciativa son los miembros del grupo de investigación Proseim, de la Facultad de Medicina de la U. de la Sabana (liderado por el doctor Daniel Botero), que en convenio con la U. Federal de Espíritu Santo, de Brasil, esperan descifrar, en máximo tres años, el lenguaje de la actividad eléctrica de nuestras células y adaptarlo al de la silla de ruedas. Aunque en Japón se presentó un prototipo similar, esta silla sólo funciona con personas en perfecto estado de salud.
Otro de los proyectos que se robaron la atención de los asistentes y que promete revolucionar la medicina estética es el del Centro de Investigación de Ingeniería Biomédica de la U. Javeriana, dirigido por Guillermo Peña, que consiste en utilizar seda de araña y tendones de vaca para combatir las arrugas. “Los productos que existen son temporales y queremos fabricar uno que sea más efectivo y cuya materia prima sea mucho más similar a los tejidos de nuestro organismo”. Peña espera que el producto sea aprobado en los próximos dos años.