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Hace un par de semanas Cailey Fiesel, clienta de la tienda Zara en Connecticut, Estados Unidos, adquirió dos vestidos a precio de liquidación. Lo que no se esperaba esta mujer de 24 años era que días después de haber hecho la compra y estrenarse uno de los vestidos, un ratón muerto estaría en uno de los forros de la prenda. (Lea también: Sandalias de Zara que causan quemaduras)
"Fiesel saltó de su silla en estado de shock, estaba paralizada del miedo. Al quitarse el vestido descubrió que un roedor muerto estaba cosido en el dobladillo", describió el suceso el abogado de la clienta en la demanda judicial que ésta impuso contra Zara. (Lea: dueño de Zara recorta objetivos de tiendas y apuesta por Internet)
¿Cómo se dio cuenta?
Luego de percatarse de un extraño olor en sus prendas nuevas y de que una cuerda rígida estaba colgando de la costura del vestido, Fiesel tiró de esta y, según ella, descubrió que se trataba de la pata de un ratón muerto en el fondo del dobladillo.
La empresa española se pronunció al respecto y dijo que estaba al tanto del caso y que investiga las razones del hallazgo. Agregó que “Zara en Estados Unidos tiene estrictos estándares de seguridad y salubridad. Estamos comprometidos con los usuarios al garantizarles que todos sus productos cumplan con estos requerimientos”.