Recomendaciones y cuidados con el uso del maquillaje

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A lo largo del tiempo, las mujeres, y recientemente los hombres, han utilizado el maquillaje para cubrir imperfecciones del rostro o para que este se vea más radiante e iluminado. Algunos lo usan en mayor proporción y con más periodicidad que otros. Lo cierto es que, pese a las nuevas tecnologías que constantemente implementan las marcas en sus productos y a la reinvención que hacen en sus ingredientes, es innegable el impacto que genera en la piel.

No se trata de dejar de maquillarse ni de satanizar su uso. Se trata de tomar conciencia y, por ende, ciertas medidas que no solo ayuden a que el rostro se vea más iluminado, sino que internamente contribuyan a que la piel esté sana. De acuerdo con María Paula Uribe, coordinadora de entrenamiento de la marca Revlon en Colombia, “hace unos años el maquillaje solo se usaba para camuflar, realzar y embellecer. Sin embargo, hoy hablamos de maquillaje saludable, que además de cumplir con las anteriores funciones brinde otros beneficios. La piel está expuesta a condiciones cotidianas, como la contaminación, el viento y el sol, que la afectan poco a poco, por lo que la idea es utilizar productos que la ayuden y no que la afecten”.

Lo importante en este caso es tomar conciencia de qué se está colocando en la piel, que más allá del efecto que se quiera dar proteja y brinde salud. Es importante fijarse en la formulación química del producto, pues algunos contienen sustancias altamente nocivas que ponen en riesgo la piel. Al principio puede que la persona desarrolle rápidamente una dermatitis de contacto, orzuelos o conjuntivitis, pero a futuro puede haber sustancias altamente cancerígenas.

¿Cómo elegir correctamente? “El primer consejo es usar marcas que brinden un respaldo, que cuenten con dermatólogos, oftalmólogos y especialistas que avalen sus fórmulas. Lo ideal es comprar siempre en establecimientos certificados. Podríamos decir que esa es la gran diferencia con otro tipo de maquillaje más económico o con réplicas de las marcas que en apariencia y empaque se ven igual, pero al estudiar los componentes en laboratorios se ha encontrado que contienen orina e incluso heces fecales. Por supuesto, los daños que genera esto en la piel son altísimos”.

Un segundo consejo que da la vocera es identificarse con marcas con que se comparta una filosofía. “Nosotros, por ejemplo, lanzamos recientemente la línea Candid, enfocada en brindar un acabado muy natural y ofrecer beneficios adicionales para la piel del rostro. Tanto la base como el corrector y los polvos están pensados para proteger la piel de la contaminación y de la luz azul. Es una fórmula limpia, que no contiene siliconas, ni parabenos ni ftalatos, sustancias que ayudan a dar un mejor acabado en algunos tipos de maquillaje. Adicionalmente, viene con una infusión de vitamina E que está haciendo una acción anticontaminación y antiluz azul, no del maquillaje sino de los agentes externos que la pueden agredir”.

La idea es que cada perfil de mujer pueda escoger su maquillaje y adaptarlo al look que quiere mostrar cada día. La creencia de que el maquillaje busca rostros perfectos y máscaras que cubran las imperfecciones hace parte del pasado. Hoy la tendencia son las texturas ligeras con acabados suaves que no impongan un rostro, sino que sirvan de reflejo de la personalidad, que dejen ver mujeres diferentes y empoderadas que algunos días deciden aplicarse más producto que otros.

El maquillaje en sí mismo no nació para dañar, destruir o envejecer la piel, sino para ser un aliado que realza la belleza.

Consejos de una experta

La dermatóloga Olga Forero advierte que es importante tener precaución al momento de comprar maquillaje, con el fin de evitar enfermedades y contagios en la piel que pueden terminar en problemas más graves, como una dermatitis atópica.

Afirma que las alergias se manifiestan de formas distintas, dependiendo de las personas y las zonas afectadas, e incluso pueden variar los síntomas y su intensidad. Algunas veces se presentan inmediatamente y otras pueden ser casi imperceptibles y aparecen con el paso del tiempo. En cualquier caso es importante prestar atención a los siguientes síntomas: Inflamación, sequedad, picazón, enrojecimiento, irritación, ardor.

Otros aspectos importantes a la hora de evitar daños en la piel son: no utilizar maquillaje de otras personas, pues pueden causar infecciones transmitidas por medio de los pinceles, espumas y lápices, y limpiar bien las brochas y no guardarlas húmedas, para evitar que se propaguen bacterias.