Restrepo argumenta que Santos ha traicionado las banderas del uribismo con las cuales fue elegido y anunció que “soy un colombiano en la oposición. Que un presidente sea elegido con un programa y esté gobernando con otro, eso no se puede aceptar. Es un gobierno de mentiras y estoy en desacuerdo con su continuidad”.
Por este motivo, el excomisionado anuncia su cruzada antirreeleccionista, como en el pasado lo hicieran los opositores de Uribe. Pese a que el primer mandatario ha dicho más de una vez que no está interesado en ir por otros cuatro años en la Casa de Nariño, en una declaración dada hace algunas semanas, en una entrevista para la CNN, abrió la puerta a esa posibilidad al advertir que “si alcanzo a cumplir las metas sociales que me he propuesto, espero poder irme tranquilo para mi casa el 7 de agosto de 2014. De lo contrario, habrá que pensar en la reelección por una sola vez”.
Lo que más llama la atención es que Restrepo haga el anuncio antirreeleccionista en el preciso momento en que la justicia se le viene encima por las presuntas falsas desmovilizaciones, en una coyuntura en la que ha hecho también acusaciones en contra de Carlos Alonso Lucio, esposo de la fiscal general, Viviane Morales.
Este se convierte en el más reciente capítulo de una enemistad que se inició cuando Restrepo asumió como presidente del Partido de la U y, según señala, pupitrearon una reforma a los estatutos quitándole casi todas las funciones y quedando bajo la responsabilidad de una deuda superior a $4000 millones. Además, asegura, Santos montó una dirigencia paralela en la Fundación Buen Gobierno lo que ocasionó su renuncia.
Ya con Santos como presidente, Restrepo criticó el nombramiento de Germán Vargas Lleras, Juan Camilo Restrepo y Rafael Pardo, hoy ministros del Interior, de Agricultura y de Trabajo, respectivamente, quienes fueron detractores en el gobierno Uribe.