Santiago Rojas, reconocido médico alternativo de nuestro país, decidió convertir en realidad uno de los sueños que tenía de niño: hacer una novela. El resultado: una obra que podría ser un híbrido entre los libros de superación personal como El alquimista, de Paulo Coelho, y los de aventuras y fantasía como El Señor de los Anillos. Después de haber publicado seis libros como Esencias florales a cada momento o ¿Cómo combatir la tensión y el estrés? Dos mundos resulta ser una apuesta arriesgada de editorial Norma de lanzar el libro de alguien que nunca antes había escrito una novela. El Espectador habló con Rojas sobre su salto al género de la fantasía.
¿De dónde surge la idea de escribir ‘Dos mundos’?
Desde pequeño siempre quise hacer una novela que se desarrollara en el mundo de la fantasía y tomé la decisión porque quise enseñarle a un público mayor sobre un tema que no es muy cotidiano, el de la espiritualidad, con un lenguaje que se ha vuelto común: el de la fantasía. Traté de generar un símil entre la construcción del alma humana y la del planeta. En la novela el planeta perdió el contacto con el cosmos y tiene que reconstruirlo. En la experiencia cotidiana, el hombre pierde contacto con su espiritualidad y la idea es volverla a encontrar.
¿Alguna vez pensó que podría ser escritor?
Durante muchos años pensé que podría serlo. Pero hoy en día me siento menos escritor y más instructor. Simplemente escribo para enseñar.
¿Cómo fue el salto del lenguaje médico, que es más bien científico, al fantástico?
Creo que la medicina es tanto ciencia como arte, pero a los médicos se nos olvida constantemente la segunda. Pienso y siento como médico, pero veo al ser humano como un aspecto más allá que simplemente una bioquímica o una estructura corporal.
¿Qué reacción cree que tendrán quienes vienen leyendo sus otros libros?
Simplemente van a ver una faceta lúdica que yo tengo y consideraría que la gran mayoría de mis pacientes, que me conocen, saben que esto es parte de lo que soy.
¿Qué espera del público?
Que se lo goce y que, al hacerlo, aprenda cosas que le sirvan para su vida interior.
¿Por qué escribir enmarcado en el de género fantástico y no en el de superación personal?
Porque me parece que uno debe tratar de usar una forma más lúdica y sencilla para transmitir conocimiento. Los libros de espiritualidad son muy pesados, los de crecimiento personal, muy característicos. Yo quería hacer algo diferente. Puede que no funcione, pero quería intentarlo.
¿Cree que sus otros libros fueron preámbulo para ‘Dos mundos’?
Creo que mi más grande obra son mis dos hijos y después este libro. Los otros libros son experiencias distintas, pero sin duda ésta ha sido la más compleja, más profunda, más sentida y más gozada.