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Una fotografía comenzó a generar “ruido” el 22 de junio de 2017 en los grupos de redes sociales de observadores de monos en Malasia. Un individuo había sido fotografiado cerca del río Kinabatangan, en el Santuario de Vida Silvestre del Bajo Kinabatangan. Lo de “misterioso” radica en que su apariencia no se identificaba completamente con ninguna especie conocida. Se comenzó a especular sobre que se había descubierto una especie nueva. Hoy todo a punta a que no es así.
Un equipo de investigadores publicó un artículo en International Journal of Primatology en el que sugiere que se trata de un animal híbrido entre un mono narigudo y un langur plateado. Su hipótesis es el resultado de un estudio en el que se evaluaron las fotografías del avistamiento del animal. El “mono misterioso” fue visto en tres ocasiones entre junio de 2017 y noviembre de 2018. Nuevamente fue observado en septiembre de 2020, durante la redacción del artículo.
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En esa ultima ocasión los investigadores notaron que se trata de hembra adulta ya tiene un bebé y un seno hinchado, lo que sugiere lactancia. La hipótesis de que es un híbrido parte de diferencias físicas: el mono estudiado tiene diferencias y similitudes físicas con monos de las dos especies mencionadas. Su color, la forma de su nariz e incluso su tamaño. El individuo híbrido podría ser el resultado de un cruce entre un macho narigudo y un langur hembra.
Ese cruce se habría dado debido a cambios en el paisaje producidos por el hombre. Los investigadores sugieren que la expansión de las plantaciones de palma aceitera confinó a las dos especies de monos a convivir en bosques ribereños a lo largo del Kinabatangan. “Por lo tanto, esta observación también puede tener implicaciones para la conservación, lo que indica un acceso limitado a la pareja y oportunidades de dispersión para estos primates amenazados”, dice el estudio.
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