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Un nuevo informe del programa Medio Ambiente de las Naciones Unidas, llamado “Más allá de una era de residuos: convertir la basura en un recurso”, brindó datos clave para comprender cómo va la gestión de basuras a nivel mundial desde 2018 hasta hoy. También, señaló preocupantes proyecciones para el futuro.
Para explicarlo un poco mejor, Inger Andersen, directora ejecutiva de ese programa de la ONU, afirmó que las principales preocupaciones expresadas en el informe pueden resumirse en datos clave, como la predicción de aumento de residuos: de 2.300 toneladas anuales en 2023, pasaremos a 3.800 toneladas en 2050.
Otro agravante, según Andersen, es que solo el 9 % de los plásticos a nivel mundial se recicla; apenas el 17 % es incinerado, el 22 % no se controla, y el 46 % se echa a los vertederos, fluyendo por los ríos hasta llegar al océano.
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Además, el informe también despliega datos de lo que cuesta la gestión de basuras en todo el mundo, y la suma aproximada es de 252 mil millones de dólares anuales. Sin embargo, teniendo en cuenta los costos ocultos de la contaminación, el cambio climático y las consecuencias para la salud humana, esa suma podría duplicarse para 2050, alcanzando los 640 mil 300 millones de dólares anuales, con lo que podrían construirse 1,281 estadios de fútbol de tamaño promedio.
Una de las soluciones que el informe propone es la instauraron de un modelo de economía circular, que adopte medidas preventivas y prácticas sociales sostenibles respecto al aprovechamiento de residuos, y que permita generar una ganancia de 108.500 millones de dólares al año para 2050. “Tenemos que empezar a pensar en la basura como recurso”, continuó Anderson. “También, tenemos que generar un cambio hacia prácticas de residuo cero y garantizar una transición justa”.
Por último, Naciones Undas también hizo un llamado a gobernos nacionales, empresarios, bancos y ciudadanos para actuar urgentemente y así “evitar el peor escenario proyectado en 2050″.
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En Colombia, vale la pena recordar que el pasado 21 de noviembre de 2023 se firmó un Pacto Nacional para sustituir los plásticos de un solo uso, cambio que se espera ocurra de manera gradual en todo el país.
La ministra de Ambiente, Susana Muhamad, explicó que Colombia produce anualmente más de un millón de toneladas de este material y un colombiano promedio puede llegar a consumir 24 kilogramos de plástico en el mismo periodo de tiempo. “Ese producto es uno de los mayores contaminantes, sobre todo para las fuentes hídricas. Por eso, necesitamos un uso racional”, afirmó Muhamad durante la firma del pacto que, además, contó con la presencia de académicos, miembros de la industria del reciclaje e integrantes del Gobierno.
La firma sucedió en el marco del artículo 27 de la Ley 2232 de 2022, que establece las medidas para la disminución y sustitución de plásticos y elementos de un solo uso. Allí también se explica cómo sucedería su sustitución gradual por alternativas sostenibles, como la bioeconomía y la economía circular. La primera, según la norma, es aquella que gestiona eficiente y sosteniblemente la biodiversidad y la biomasa para generar nuevos productos, procesos y servicios de valor agregado basados en el conocimiento y la innovación. La segunda es un modelo económico basado en sistemas de producción y consumo que promueven la eficiencia en el uso de materiales, agua y energía, teniendo en cuenta la capacidad de recuperación de los ecosistemas, la colaboración entre actores y los nuevos modelos de negocio.
Desde su firma el año pasado, la Ley estableció que productos como bolsas en puntos de pago, envases, pitillos, empaques, láminas, adhesivos y hasta cubiertos deberían ser sustituidos de manera progresiva para ser prohibidos posteriormente.
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