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El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, emitió una alerta este miércoles durante el Foro Económico Mundial en Davos (Suiza), asegurando que la “adicción mundial a los combustibles fósiles es un monstruo de Frankenstein que no perdona nada ni a nadie”.
Las declaraciones de Guterres llegan luego de que el recién posesionado Donald Trump anunció el retiro de Estados Unidos de los Acuerdos de París y sus compromisos verdes nacionales, a través de una serie de decretos ejecutivos.
En ese sentido, Guterres instó a los gobiernos a cumplir sus promesas en el marco del Acuerdo de París, en particular en la tarea de elaborar nuevos planes nacionales de acción por el clima antes de febrero (NDC, por sus siglas en inglés), como una medida previa a la cumbre mundial del clima que se realizará, en 2025, en Brasil.
Guterres destacó la “sombría ironía” que revela un análisis publicado por el periódico The Guardian al principio de 2025, que señaló que 13 de los mayores puertos del mundo para superpetroleros son vulnerables a la subida del nivel del mar. “Esta subida del nivel del mar es causada por el aumento de las temperaturas. Y la subida de las temperaturas, es causada, en su inmensa mayoría, por la quema de combustibles fósiles”.
Por su parte, Guterres también criticó a un grupo líderes de los grandes bancos mundiales, quienes se retiraron sus compromisos climáticos poco antes de la posesión de Trump. De acuerdo con el secretario de la ONU, esta parte del sector financiero se encuentra en el lado “equivocado de la historia, el lado equivocado de la ciencia y el lado equivocado de los consumidores que buscan más sostenibilidad, no menos”.
En contraste, Guterres destacó la “extraordinaria oportunidad económica” que representan las energías renovables “que beneficiarán a la población de todos los países y harán inevitable el fin de la era de los combustibles fósiles, por mucho que los intereses creados intenten impedirlo”.
Vale señalar que el año pasado fue el más caluroso de la historia y en el que se registraron emisiones récord por la quema de carbón, petróleo y gas. Además de esto, fue el primer año en superar el aumento de temperatura de 1,5 grados fijado por el Acuerdo de París.
“A nuestro alrededor, vemos signos claros de que el monstruo se ha convertido en amo”, manifestó Guterres. “Lo que estamos viendo hoy -la subida del nivel del mar, olas de calor, inundaciones, tormentas, sequías e incendios forestales- son solamente un anticipo de la película de terror que se avecina y significa que tenemos que luchar aún más para encarrilarnos”.
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