Aunque las academias de conducción promulguen entre sus estudiantes los hábitos viales para una conducción segura, estas técnicas de manejo defensivo parecen sumergirse hasta desaparecer dentro del enorme mar de vehículos que transitan por las vías de las grandes y principales ciudades de Colombia.
La dinámica propia de las enormes urbes (atascos, accidentalidad, etc.) puede promover actitudes que representan un riesgo para todos los actores viales. Excesos de velocidad, adelantamientos agresivos y maniobras que limitan la distancia entre vehículos a milímetros son comportamientos que no solo afectan la convivencia entre los actores viales, sino que también se ven reflejados en el consumo de combustible.
En busca de recomendaciones que limiten el consumo al realmente necesario para movilizarse, el equipo de “El Mecánico Recomienda”, de El Espectador, consultó a los ingenieros y grupos de mecánica de algunos de los fabricantes de vehículos con presencia en el país.
Los consejos que brindaron los especialistas pueden dividirse en hábitos antes y durante la conducción. Por ejemplo, Misael Bermúdez, coordinador de entrenamiento y soporte técnico de Autoelite, recomienda asegurarse de mantener los vehículos al menos con medio tanque de combustible, pues cantidades inferiores a esta promueven la evaporación del combustible y el desgaste de la bomba.
De igual forma, Elkin Espitia, líder de ingeniería y programas regulatorios de General Motors, asegura que los conductores tienden a realizar aceleraciones bruscas creyendo que los hará llegar más rápido a su destino, sin embargo, estas altas revoluciones generan un mayor esfuerzo, más emisiones de gases y, por lo tanto, un aumento en el consumo. Esto sin mencionar los riesgos que generan en la seguridad vial.
A continuación encontrará las recomendaciones de los expertos para fomentar una reducción en el gasto de combustible en carros y motos.
Para autos:
1. Mantenimiento: verifique que el carro esté en perfecto mantenimiento en temas como sincronización, revisión de ajuste de motor, entre otros.
2. Presión de las llantas: esto cumple un rol importante, ya que entre menos presión haya mayor esfuerzo tiene que hacer el carro al moverse, por lo tanto, requiere mayor consumo.
3. Reduzca el peso: evite las cargas innecesarias, por ejemplo el equipaje que puede redundar en utilizar más combustible de lo que realmente se necesita.
4. Velocidades constantes: muchas personas creen que hacer aceleraciones bruscas les hace llegar más rápido, pero en temas de manejo urbano lo más importante es mantener una velocidad constante. Cambio de aceleraciones bruscas generan un mayor esfuerzo para el vehículo.
5. Aire acondicionado: evite el uso de aire acondicionado en ciudades como Bogotá, la zona central o andina. Es importante usar el aire acondicionado en los momentos donde realmente se requiera, de acuerdo con Elkin Espitia, líder de ingeniería y programas regulatorios de General Motors.
6. Evite realizar cambios súbitos de aceleración ni transite en primera o segunda, cuando puede llevar el vehículo a marchas entre cuarta y quinta, donde la velocidad constante y la inercia permiten un menor consumo de combustible.
Para motos:
Cuando el filtro de aire está sucio, el ingreso de aire al motor se restringe y dificulta su funcionamiento, según BMW Motorrad.
Evite el exceso de velocidad, porque hace que el motor gire a altas revoluciones, con lo que el consumo se dispara.
Los amortiguadores dañados hacen que las llantas reboten sobre la calzada, en vez de rodar, generando mayor esfuerzo.
Las ruedas desalineadas giran en una forma contraria al eje vertical de la moto.
Las ruedas desbalanceadas generan vibraciones al girar, lo que impide que las llantas rueden suavemente.