El stand de Peugeot, en la edición 88 del Salón del Automóvil de Ginebra, ha sido uno de los más atractivos del evento. Su acogida no se debe a la presentación de un innovador vehículo “verde” o a la exhibición de un prometedor concepto. Las miradas y opiniones se han concentrado en la presentación de la nueva generación del 508.
Aunque en los últimos años la industria automotriz ha concentrado su producción al campo de los SUV´s de todas las gamas, la firma francesa se la juega en un segmento más tradicional con la renovación de una de sus berlinas. (Lea Lamborghini Urus: El SUV más rápido del mundo).
A simple vista, el nuevo 508 parece más alargado que su generación anterior, sin embargo, sus medidas se han reducido (4,7 m de largo, 1,8 de ancho y 1,4 de alto). Este efecto óptico se debe al diseño de la carrocería, con un vidrio trasero inclinado de forma horizontal, que le brinda un aspecto más aerodinámico y deportivo.
Su interior es igualmente llamativo. El volante se ha rediseñado para adoptar una forma casi rectangular y su sistema de infoentretenimiento se hace más imponente al contar con una pantalla táctil de 19 pulgadas.
Para su primera edición, que saldrá al mercado europeo en octubre, el 508 adoptará un motor de gasolina PureTech 225, que ofrece una velocidad máxima de 250 km/h.
El Peugeot 508 hace parte de las tres primicias mundiales que preparó el fabricante galo para el Autoshow de Ginebra, en las que se encuentran también el nuevo Rifter y el Rifter 4x4.