
Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Bosa, Kennedy, Engativá y Suba, son las localidades donde más se registró daños de tuberías y Ciudad Bolívar, San Cristóbal, Santa Fe y Usme, donde tuvieron mayores pérdidas de agua, durante 2024. Según una investigación de El Espectador, entre enero y septiembre del año pasado 89 millones de metros cúbicos (m3) de agua se perdieron a causa de una tubería dañada. Es decir, lo equivalente al 31 % de la capacidad del sistema Chingaza, cantidad suficiente para abastecer a la capital por 63 días.
Lea más: Se ha perdido tanta agua como para abastecer por dos meses a toda Bogotá
Según define el Acueducto, las pérdidas en los sistemas se refieren a los volúmenes de agua potable que se pierden desde la salida de las plantas de potabilización hasta el punto de consumo de los usuarios, y son el resultado de uno o varios fenómenos como fugas o roturas en tuberías (como mencionamos anteriormente), fugas en acometidas, reboses en tanques, fugas en equipos o accesorios, errores en la medición o conexiones ilegales o fraudes.
Sobre esto último, durante el 2024, la Empresa de Acueducto realizó 2.357 inspecciones y operativos que permitieron gestionar la recuperación de cerca de 3 millones de metros cúbicos por alrededor de 19 mil millones de pesos. Durante las inspecciones realizadas se destacan 15 casos de captación ilegal de agua en sitios como hoteles, lavaderos de carros y papas, venta de agua en carrotanques e incluso en una institución educativa privada.
¿Cómo combatir la pérdida de agua?
La Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB), anunció este jueves, un trabajo conjunto con la Universidad de Los Andes, para diseñar un plan para hacer frente a la problemática de pérdida de agua en la capital.
Para ello, esta Institución Educativa Superior -donde expertos nacionales e internacionales también apoyarán- adelantará una consultoría para que la Empresa mejore sus políticas y herramientas que integran distintas metodologías, tecnologías y mecanismos para controlar y reducir eficientemente las pérdidas técnicas y comerciales del agua.
Le puede interesar: Embalses a la baja tras diciembre: Bogotá llegaría al día cero en marzo
“Esta iniciativa se suma a la estrategia que adelanta la EAAB. Invertiremos $2.565 millones para la elaboración de este mapa de ruta que brindará entre otros los siguientes productos: el cálculo del nivel económico de pérdidas, la política de medición, la metodología de priorización y evaluación de proyectos de pérdidas, la gestión social del agua en asentamientos subnormales, la metodología para el cálculo de los indicadores de gestión de pérdidas, la identificación y evaluación de las alternativas y proyectos para lograr las metas establecidas en la regulación vigente, la gestión de pérdidas por resultados y la estrategia contractual para hacer realidad los proyectos priorizados”, detalló la Empresa.
Perdida de agua
En medio de la coyuntura actual, en la que cada gota cuenta, cualquier centímetro cúbico del recurso que se pierde puede convertirse en una mella importante para las reservas de la ciudad. Durante un proceso de investigación, la Personería se ha topado con un fenómeno del que poco se habla: el agua no contabilizada. “Disminuir un 10% el agua no facturada equivale a más de 7 millones de m3″, afirma el personero de Bogotá, Andrés Castro Franco.
Lo anterior, son caudales del recurso que pasan por todo el proceso de potabilización y de flujo hacia la ciudad, pero que no son aprovechadas por la ciudadanía. Dicha situación se debe principalmente a dos causas. La primera, a las fugas en el sistema de acueducto en la ciudad producto de daños sin corregir o no gestionados de la mejor forma.
Pero, principalmente, esta cantidad de agua se estaría perdiendo por cuenta de las conexiones ilegales. A través de estas fuentes clandestinas, cuya cuantía se calcula en 7679 conexiones, hay hogares de la ciudad que se abastecen del recurso sin ningún tipo de control al consumo, cuyo coste, finalmente, deben asumir los 2,7 millones de usuarios que sí pagan su factura bimestralmente. De acuerdo con las cifras que obtuvo La Personería, de cada 100 metros cúbicos de agua potabilizada, la ciudad pierde 40 m³ como consecuencia de los dos flagelos descritos anteriormente.
Más noticias: “Estamos mejor preparados este año”: Galán sobre abastecimiento de agua
Sobre este fenómeno, también escribió para El Espectador, Andrés Torres, director del Instituto Javeriano del Agua, Universidad Javeriana. “Es necesario precisar que el agua captada en los embalses no la usan totalmente los usuarios, sino que hay pérdidas en la conducción y en todos los procesos asociados (infiltraciones, fugas, etc.), las cuales pueden alcanzar hasta un 30%, lo cual es normal”, señaló el experto.
Aunado a lo anterior, el ente de control encontró ineficiente el uso de los recursos que se destinan para disminuir este impacto, el cual ha sido, en los últimos 20 años, de $2.5 billones. La cantidad, sumada a las perdidas comerciales de la empresa por las conexiones ilegales, y el agua que se escapa a borbotones por distintas fugas en la ciudad, representa un claro detrimento a las arcas de la ciudad.
¿Cómo denunciar el hurto de agua potable en Bogotá?
La Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá tiene habilitado un canal para la denuncia ciudadana en la AcuaLínea 116 o al correo electrónico recuperaciondeconsumoseaab@acueducto.com.co, este canal funciona para notificar de los posibles casos de robo de agua en la ciudad.
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.

Por Redacción Bogotá
