La Ciudadela del Cuidado, tal como lo soñó la exalcaldesa Claudia López, vuelve a ser una idea por evaluar. A pesar de que la pasada administración adjudicó a contrarreloj el contrato para sacar adelante la obra, hoy se queda sin piso. La Empresa de Renovación Urbana de Bogotá (Renobo) y la constructora Las Galias terminaron anticipadamente y de mutuo acuerdo el contrato.
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Vale recordar que la obra la proyectó la pasada administración en los terrenos que se habían comprado para construir el corredor ALO Norte, el cual López descartó por los retos ambientales que representaba. Se trataba, en palabras de la exalcaldesa, de un multicampus universitario, que beneficiará a 17 mil estudiantes, con una biblioteca, el Museo Muisca, un colegio, una manzana del cuidado y 14.000 viviendas. Además, dejaba terrenos para un hospital, una estación de Policía, un jardín infantil, un Centro Crecer, tres centros de salud, una casa de justicia y una estación de bomberos.
Sin embargo, con el cambio de alcaldía y tras la reciente aprobación del Plan de Desarrollo, del alcalde Carlos Fernando Galán revivió la avenida. Gracias a esto, es que la administración y la constructora “manifestaron expresamente renunciar a cualquier reclamación con la terminación anticipada del contrato”. Un dato de contexto: el Contrato de la Ciudadela se encontraba suspendido desde el pasado 19 de enero, cuando Galán aplicó una cláusula que le permitía frenar el proyecto por seis meses o hasta que se adoptara el nuevo Plan de Desarrollo.
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La decisión de acabar el contrato, de forma anticipada y de mutuo acuerdo, es un paso más en la idea de concretar la ALO Norte, que será una avenida de 12 carriles, la cual es la última etapa de un gran corredor de 50 kilómetros, que conectará el extremo sur con el extremo norte, por todo el borde occidental. Según el proyecto, solo el tramo norte tendría 20 kilómetros, entre la calle 80 y la autopista Norte, más allá de la calle 235. Con el corredor, se buscaba descongestionar las vías de la capital.
A modo de conciliación, la alcaldía Galán se comprometió a no descartar del todo el plan del multicampus educativo e integrarlo con el corredor vial que, dice, solo la contratará hasta la calle 153, dejando para el próximo alcalde el “chicharrón” de tramitar los permisos para cruzar por la reserva Van der Hammen, que es, tal vez, el reto ambiental más complejo del proyecto vial.
Por ahora, todo esto, son decisiones administrativas. De este punto a que ambos proyectos sean una realidad hay un trecho largo por recorrer.
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Por Redacción Bogotá
