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En el marco de la feria AANATO, que cerró el pasado viernes, el Instituto de Turismo de Bogotá dejó en la mesa una propuesta de reforma a la distribución de recursos recaudados por impuestos al turismo: el objetivo es que las regiones tengan acceso a financiación de proyectos, seguridad y más, para atraer turistas.
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Así vuelve la discusión sobre la descentralización de los impuestos turísticos. Según el IDT, a pesar del crecimiento del sector, “los recursos continúan concentrados a nivel nacional, impidiendo que las regiones accedan directamente a los fondos que generan. Mientras en 2024 el turismo representó el 2,3 % del PIB nacional, la mayor parte de la recaudación fiscal permanece centralizada, limitando la inversión en los destinos”.
La propuesta se basa en la premisa de que el crecimiento del turismo no es mérito exclusivo del gobierno central, sino el resultado del esfuerzo de las regiones. “Mientras países como España y México han adoptado modelos de financiamiento sostenible, Colombia sigue dependiendo de proyectos temporales y de la voluntad gubernamental”, sostiene el instituto.
Andrés Santamaría, director del IDT y articulador de la propuesta, indicó: “el crecimiento del turismo requiere estrategias a largo plazo que garanticen infraestructura, sostenibilidad y promoción. Ciudades como Barcelona y Ciudad de México han logrado consolidarse como destinos de clase mundial gracias a la inversión continua en movilidad, seguridad y desarrollo cultural”.
Santamaría sacó a la luz el ejemplo de Monserrate: “de los más de 13,5 millones de turistas que visitaron Bogotá en 2024, Monserrate recibió alrededor de dos millones, pero sus ingresos no se reinvierten directamente en su mejora”.
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Por Redacción Bogotá
