Un juez de control de garantías envió a la cárcel a alias “Chilingo”, “Lucho” y “La Cucha” luego de que la Fiscalía les imputara los delitos de concierto para delinquir y hurto agravado por varios hurtos que habría cometido en buses de servicio público en las localidades Kennedy, Engativá, Bosa y Fontibón, suroccidente y occidente de Bogotá.
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Esta banda operaba bajo la modalidad de cosquilleo, en la cual se despoja a las víctimas de sus pertenencias sin que esta se percate, y estaba conformada por integrantes de una misma familia en la que la madre de los cabecillas, “La Cucha”, era cómplice y tenía la tarea de recibir, al interior de los vehículos del transporte público, los elementos hurtados y esconderlos para poder salir sin ser descubiertos.
Por su parte, “Chilingo” y “Lucho” tenían la función de estudiar con antelación las rutas más congestionadas en los buses, ubicar rutas para escapar y seleccionar a las personas que robarían con base en las pertenencias que llevara.
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Cuando ponían en marcha su actividad delincuencial en los buses, todos se apropiaban de los papeles que tenían que jugar en la comisión de los robos: hablaban entre sí, empujaban en la entrada y salida de pasajeros, así como la persona que sacaba de los bolsillos, maletas o carteras las pertenencias de valor de las víctimas.
Según informó Blu Radio, durante la investigación a esta banda se estableció que sus integrantes tenían antecedentes por hurto y homicidio.
Por Redacción Bogotá
