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Todo empieza con una pregunta simple: ¿qué le escribiría un bogotano a su ciudad? Y es que, en la capital, incluso una nevera puede convertirse en un archivo emocional para guardar esas respuestas. Así lo explica Idartes a El Espectador. “Cartas a la Nevera” es una obra escénica y expositiva del Laboratorio de Fortalecimiento a la Escena Joven de Artefactum que busca transformar mensajes escritos por ciudadanos en escenas teatrales y piezas visuales que reflexionan sobre Bogotá.
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Según explica Idartes, el propósito de esta pieza artística es “abrir un espacio para que la ciudadanía pueda pensarse en relación con Bogotá desde la emoción y la memoria”. Muchas de esas cartas se resguardan en una urna simbólica; otras se seleccionan para una exposición y, en un caso particular, una de ellas llega al escenario y se convierte en obra de teatro.
La nevera: un apodo hecho homenaje
Como dato curioso, Edwin Rodríguez, uno de los coordinadores de Artefactum, explica que el nombre del proyecto surge como un homenaje a Bogotá y a la forma en que quienes llegan de otras regiones suelen llamarla: “la nevera”. La escenografía también dialoga con esa idea: la obra utiliza diez neveras en desuso, cada una intervenida con elementos que evocan barrios, personajes o situaciones significativas de la ciudad.
Además, las historias que dan origen a las escenas nacen de las vivencias de participantes de distintas localidades, cuyas experiencias, reflexiones y anécdotas se convierten en la materia prima para la creación.
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Los artistas detrás de la obra
En este proceso creativo participaron catorce artistas jóvenes del Laboratorio de Fortalecimiento a la Escena Joven de Artefactum, guiados por el creador y laboratorista Johan Velandia. Ellos fueron los encargados de transformar las cartas en microescenas teatrales y en neveras intervenidas que funcionan como soportes de memoria urbana. Cada pieza explora afectos, tensiones y recuerdos que dialogan con distintos territorios de la ciudad.
De otro lado, el nombre del proyecto surge como un homenaje a Bogotá y a la forma en que quienes llegan de otras regiones suelen llamarla: “la nevera”.
Al proceso también se sumaron reconocidos artistas y figuras de la cultura que aceptaron escribirle una carta a Bogotá. Entre ellos se encuentran María Claudia Parias, Marcela Benjumea, Patricia Ariza, Dago García, Élber Gutiérrez, Santiago Rivas, Julián Triana, Juan Tarquino, Frank Solano y el propio Johan Velandia. Sus mensajes, al igual que los del público, se integraron al archivo creativo del laboratorio y dialogan con las escenas y las intervenciones que hacen parte de la obra.
Una invitación a mirar Bogotá desde la emoción
Con esta obra, Artefactum e Idartes buscan crear un espacio donde el arte se construya de manera colectiva y desde el territorio.
El proyecto reivindica la creación joven, la memoria urbana y las formas afectivas de relacionarse con la ciudad, proponiendo una lectura sensible de Bogotá a partir de las voces de quienes la habitan.
“Cartas a la Nevera” tiene funciones del 3 al 6 de diciembre en la Casa Iregui (Calle 9 No. 8–71), a las 7:00 p. m. La entrada es libre hasta completar aforo. Idartes espera que el público encuentre en estas cartas,y en las escenas que provocan. nuevas formas de mirar la ciudad y reconocerse en ella.
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