Conjuntos residenciales en Kennedy denuncian amenazas del “Tren de Aragua”
Integrantes de la banda criminal, que habitarían en los edificios, estarían pegando panfletos en los ascensores amenazando con envenenar el agua y lanzar granadas si se llega a alertar a las autoridades sobre sus actividades delictivas.
Las amenazas por parte de grupos delictivos a los habitantes de la localidad de Kennedy continúan. Esta vez, las intimidaciones tienen el nombre de la organización “Tren de Aragua”, que mediante panfletos ha prometido presuntamente tomar acciones contra dos conjuntos residenciales, donde también vivirían integrantes del grupo, si no guardan silencio frente a sus crímenes.
Lea: Pese a levantamiento de algunas protestas, taxistas dicen que el paro continuará.
De acuerdo con el Ojo de la Noche, desde hace aproximadamente 15 días, los habitantes de dos conjuntos residenciales, ubicados en los barrios Patio Bonito y Tintal, comenzaron a toparse en los pasillos y ascensores con panfletos de amenaza firmados por el Tren de Aragua.
“Este es nuestro territorio y no lo vamos a abandonar, menos con la amenaza de los “tombos” que se nos están metiendo a nuestra casa. Muerte a los de la administración, los guardas y la junta. Tienen 48 horas para que renuncien o todos van a pagar”, se lee en una de las misivas.
De acuerdo con los residentes, en los carteles se afirma que, de llegar a avisar a las autoridades sobre actividades criminales, y si la junta administrativa no renuncia, los delincuentes pueden envenenar el agua que consumen las familias de los edificios, atentar contra el funcionamiento de los ascensores e incluso, lanzar granadas contra los vehículos.
Lea también: Aprueban proyecto para garantizar dignidad menstrual a habitantes de calle en Bogotá.
“Vivir acá se ha vuelto un complique, amenazan con contaminar el agua y afectar la maquinaria de los ascensores. Son muy descarados porque prácticamente salen del apartamento donde manejan el expendio de droga y la comercializan al aire libre. Rompen las puertas de las terrazas para consumir alucinógenos con sus clientes”, dijo una residente que guardó su identidad, al medio de comunicación.
“No me siento segura, a veces uno llama a la Policía cuando hay exceso de ruido o cuando integrantes le pegan a los vigilantes, pero los uniformados no llegan”, indicó otra habitante del sector afectado.
La inseguridad y zozobra que viven los habitantes de estos edificios han generado que los letreros de “se arrienda” y “se vende” se incrementen. De acuerdo con Edwin Zartos administrador de uno de los conjuntos, se han desarrollado un aproximado de 3.000 trasteos en el último semestre.
“Satanás II” es otro grupo que viene amedrantando a la ciudadanía de esta localidad del sur de Bogotá. También con panfletos y con disparos a las fachadas de las casas y locales, vienen extorsionando a los comerciantes al solicitarles altas sumas de dinero.
En contexto: Bogotá: capturan a integrantes de “Satanas II”, banda de extorsión en Kennedy.
El pasado 14 de febrero, las autoridades distritales lograron la captura de varios de los integrantes y la incautación de armas de fuego, panfletos y celulares que serían usados para amenazar a las víctimas.
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.
Las amenazas por parte de grupos delictivos a los habitantes de la localidad de Kennedy continúan. Esta vez, las intimidaciones tienen el nombre de la organización “Tren de Aragua”, que mediante panfletos ha prometido presuntamente tomar acciones contra dos conjuntos residenciales, donde también vivirían integrantes del grupo, si no guardan silencio frente a sus crímenes.
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De acuerdo con el Ojo de la Noche, desde hace aproximadamente 15 días, los habitantes de dos conjuntos residenciales, ubicados en los barrios Patio Bonito y Tintal, comenzaron a toparse en los pasillos y ascensores con panfletos de amenaza firmados por el Tren de Aragua.
“Este es nuestro territorio y no lo vamos a abandonar, menos con la amenaza de los “tombos” que se nos están metiendo a nuestra casa. Muerte a los de la administración, los guardas y la junta. Tienen 48 horas para que renuncien o todos van a pagar”, se lee en una de las misivas.
De acuerdo con los residentes, en los carteles se afirma que, de llegar a avisar a las autoridades sobre actividades criminales, y si la junta administrativa no renuncia, los delincuentes pueden envenenar el agua que consumen las familias de los edificios, atentar contra el funcionamiento de los ascensores e incluso, lanzar granadas contra los vehículos.
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“Vivir acá se ha vuelto un complique, amenazan con contaminar el agua y afectar la maquinaria de los ascensores. Son muy descarados porque prácticamente salen del apartamento donde manejan el expendio de droga y la comercializan al aire libre. Rompen las puertas de las terrazas para consumir alucinógenos con sus clientes”, dijo una residente que guardó su identidad, al medio de comunicación.
“No me siento segura, a veces uno llama a la Policía cuando hay exceso de ruido o cuando integrantes le pegan a los vigilantes, pero los uniformados no llegan”, indicó otra habitante del sector afectado.
La inseguridad y zozobra que viven los habitantes de estos edificios han generado que los letreros de “se arrienda” y “se vende” se incrementen. De acuerdo con Edwin Zartos administrador de uno de los conjuntos, se han desarrollado un aproximado de 3.000 trasteos en el último semestre.
“Satanás II” es otro grupo que viene amedrantando a la ciudadanía de esta localidad del sur de Bogotá. También con panfletos y con disparos a las fachadas de las casas y locales, vienen extorsionando a los comerciantes al solicitarles altas sumas de dinero.
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El pasado 14 de febrero, las autoridades distritales lograron la captura de varios de los integrantes y la incautación de armas de fuego, panfletos y celulares que serían usados para amenazar a las víctimas.
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