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Liam Rodríguez, un niño de 11 meses, falleció en las últimas horas luego de ser remitido a un centro asistencial sin signos vitales, proveniente de un centro de primera infancia ubicado en el municipio de La Calera. A falta de un informe forense que entregue más detalles del deceso, la familia denuncia negligencias e irregularidades en el recinto en donde era cuidado el menor.
Los hechos se produjeron sobre las 10:00 A.M. del lunes 29 de septiembre, cuando el pequeño sufrió un percance de salud y es llevado al hospital Divino Salvador de Sopó por parte de una de las docentes del centro de desarrollo integral, un lugar en donde suelen prestar servicio de cuidados para niños de la edad de Liam.
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Sin embargo, el menor de edad llegó sin signos vitales a este centro asistencial, de acuerdo con un comunicado entregado por el hospital que lo atendió. Si bien, los médicos intentaron reanimarlo por cerca de media hora, los intentos resultaron fallidos y se declaró oficialmente la muerte del menor.
Bajo esta misma línea, el hospital Divino Salvador de Sopó recalcó que el niño llegó al hospital sin vida, por lo cuanto los médicos del centro intentaron maniobras de reanimación cardiovascular y con adrenalina.
En ese orden de ideas, la familia del pequeño Liam ha denunciado por diversos medios la presunta negligencia del centro de cuidado a la hora de atender la emergencia.
En primer lugar, según le contaron familiares a los medios de comunicación, la mamá del niño habría notado rastros de sangre en el cuerpo sin vida, por lo cual todavía no está claro qué tipo de suceso fue el que desencadenó en el paro cardiorrespiratorio y su posterior deceso.
Luego, según le comentó el tío del niño a Noticias Caracol, Jonathan Rodríguez, los funcionarios del jardín retiraron el aviso del recinto, devolvieron los demás infantes a sus padres, y cerraron las instalaciones sin dar mayores explicaciones. Incluso, Rodríguez aseveró posibles irregularidades, como manipulación de pruebas en el lugar de los hechos, por parte de los funcionarios del centro de desarrollo integral.
En La Calera, Cundinamarca, investigan la muerte de un bebé de 11 meses en extrañas circunstancias. La familia del niño culpa al jardín infantil: "Las profesoras no son capaces de dar la cara".
— Noticias Caracol (@NoticiasCaracol) September 30, 2025
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¿Qué dijeron las autoridades?
La Secretaría de Educación del municipio de La Calera, en cabeza de Mayerli Moreno, aclaró que al ser un centro de desarrollo integral, es el departamento de Cundinamarca, y no el municipio, el que tiene jurisdicción sobre el control y fiscalización de este tipo de recintos.
Por lo tanto, sostuvo Moreno a Noticias Caracol, existe un vacío legal que les impide a las autoridades municipales, en este caso La Calera, fiscalizar este tipo de recintos. “La Calera es un municipio de educación no certificada, es decir, que todas las acciones de inspección y control están a cargo de la Gobernación de Cundinamarca. Es la Gobernación la que da las licencias de funcionamiento para este tipo de jardines oficiales y privadas que se rigen bajo la ley 115”, resaltó la funcionaria.
Sin embargo, acotó Moreno, la normativa solo cobija recintos de cuidado que se encargan de niños de 3 años de edad en adelante, por lo cual, el centro en donde falleció Liam está catalogado como un “centro de comercio” y, como tal, no necesita cumplir la normativa bajo el control de la Gobernación.
Por el momento, la familia del niño y la comunidad de La Calera adelanta plantones y velatones en el centro del municipio, con el fin de exigir celeridad en las investigaciones y la respectiva asignación de responsabilidades.
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