“Fue una jornada de lecciones”, dijo la alcaldesa Claudia López sobre la jornada del #21E

Como “una jornada de aprendizajes”. Así calificó la alcaldesa Claudia López la nueva jornada de manifestaciones en la capital y en la que se puso a prueba el nuevo protocolo de atención a la protesta social. Si bien hubo disturbios en cuatro de los 20 puntos de concentración, en el balance general la mandataria insistió en que hubo un cambio trascendental frente a las jornadas del año pasado, haciendo una alusión al manejo que le dio la pasada administración.

En imágenes: los disturbios que dejó el paro nacional en las calles de Bogotá

“Recibí una ciudad y una alcaldía en donde la protesta social se manejó con estigmatización, militarización, toque de queda y muertos, como Dilan Cruz. Hoy podemos informarle a Bogotá que en esta oportunidad no hubo nada de eso. En su  mayoría las protestas fueron pacíficas. Solo en cuatro tuvo que intervenir el Esmad como recurso de última instancia”, expresó López. 

Las cifras generales, según el reporte de la Alcaldía, muestran que hasta las 7:00 p.m. se contabilizaban ocho personas heridas, ninguna de gravedad; 86 personas trasladadas a los Centros de Protección (antiguas UPJ), y tres que serán judicializadas en las URI, detenidas por  delitos contra la Fuerza Pública. Además, hubo 37 buses (21 del SITP y 16 de TM) y 15 estaciones del sistema masivo vandalizadas. 

Lea: Así se vivió la jornada de protestas en Bogotá

Como era de esperarse, una vez más, unos pocos opacaron el clamor de muchos ciudadanos. De las 20 concentraciones que se vivieron en toda la ciudad, en 16 los bloqueos se resolvieron con diálogo, aplicando los primeros pasos del nuevo protocolo de atención del Distrito. No obstante, en cuatro puntos (Suba, Américas, Caracas con 72 y Jiménez con 7ma) no hubo más opción que ordenar la intervención del Esmad, “como último recurso”, recalcó la mandataria.  

“Hoy Bogotá no vio a un Esmad agrediendo civiles, sino a encapuchados atacando a los miembros de la Fuerza Pública. Por eso invito a la ciudadanía a que reconozcamos que la mayoría de las marchas fueron pacíficas y a que rechacemos  la violencia y a los encapuchados que no representan a los marchantes. El protocolo se seguirá aplicando, para no tener que usar la represión, sino en ultima instancia. Cuando tengamos que proteger la vida de los ciudadanos, siempre tendrá que intervenir la Fuerza Pública”, agregó.    

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“Lo que tenemos que lograr es que poco a poco lo que brille en las protestas sean los reclamos legítimos de los ciudadanos. Que de lo que se hable sea de la preocupación  por los asesinatos de líderes sociales; por las chuzadas a políticos y periodistas; por las amenazas reiteradas de las tales Águilas Negras a los ciudadanos, y por el pliego del Comité Nacional de Paro”, dijo también.  

Según López, como parte de las lecciones del día, están la necesidad de contar con más gestores de convivencia para atender mejor los primeros pasos del protocolo y a estar mejor preparados, pues pese a que se tenía previsto que serían 11 los puntos de concentración al final fueron 20, lo que obligó a redoblar esfuerzos. “Seguiremos dispuestos a mejorar. Como balance puedo decir que hoy en la mayoría de los casos se resolvieron con diálogo y concertación”. 

También: “El paro no es para tumbar al Gobierno”.

Al final, la alcaldesa le pidió a la Fiscalía que, frente a los tres judicializados, le esclareciera a la ciudadanía quién son esos encapuchados, a qué estructuras pertenecen y a qué propósito oscuro sirven.  “Mientras esto ocurre, a la administración no nos queda más que proteger la vida de los ciudadanos”, concluyó.  

A diferencia de la alcaldesa, la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, comenzó su intervención tras el balance final de la jornada aludiendo a los brotes de violencia en las manifestaciones. "Encontramos con profunda tristeza que son aprovechadas estas movilizaciones por vándalos que afectan el bienestar de los ciudadanos sobretodo cuando hay obstaculizaciones y afectaciones a los sistemas de transporte masivos, cuando hay bloqueos en la vía, cuando se atenta contra instalaciones privadas y públicas, esto genera gran malestar en la población porque en últimas quienes se están movilizando están generando con estos hechos violencia y desconociendo los derechos de quienes no participan, que quieren en su diario vivir tener la tranquilidad de movilizarse para llegar a sus lugares de trabajo", destacó.

El director de la Policía, general Óscar Atehortúa, detalló que se registraron manifestaciones en 103 municipios del país. De esta jornada, resultaron heridos diez uniformados, cinco en Bogotá, dos en Tunja y Medellín, y uno en Caldas.  "Los protocolos son claros y se están cumpliendo a cabalidad", aseguró.

Como “una jornada de aprendizajes”. Así calificó la alcaldesa Claudia López la nueva jornada de manifestaciones en la capital y en la que se puso a prueba el nuevo protocolo de atención a la protesta social. Si bien hubo disturbios en cuatro de los 20 puntos de concentración, en el balance general la mandataria insistió en que hubo un cambio trascendental frente a las jornadas del año pasado, haciendo una alusión al manejo que le dio la pasada administración.

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“Recibí una ciudad y una alcaldía en donde la protesta social se manejó con estigmatización, militarización, toque de queda y muertos, como Dilan Cruz. Hoy podemos informarle a Bogotá que en esta oportunidad no hubo nada de eso. En su  mayoría las protestas fueron pacíficas. Solo en cuatro tuvo que intervenir el Esmad como recurso de última instancia”, expresó López. 

Las cifras generales, según el reporte de la Alcaldía, muestran que hasta las 7:00 p.m. se contabilizaban ocho personas heridas, ninguna de gravedad; 86 personas trasladadas a los Centros de Protección (antiguas UPJ), y tres que serán judicializadas en las URI, detenidas por  delitos contra la Fuerza Pública. Además, hubo 37 buses (21 del SITP y 16 de TM) y 15 estaciones del sistema masivo vandalizadas. 

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Como era de esperarse, una vez más, unos pocos opacaron el clamor de muchos ciudadanos. De las 20 concentraciones que se vivieron en toda la ciudad, en 16 los bloqueos se resolvieron con diálogo, aplicando los primeros pasos del nuevo protocolo de atención del Distrito. No obstante, en cuatro puntos (Suba, Américas, Caracas con 72 y Jiménez con 7ma) no hubo más opción que ordenar la intervención del Esmad, “como último recurso”, recalcó la mandataria.  

“Hoy Bogotá no vio a un Esmad agrediendo civiles, sino a encapuchados atacando a los miembros de la Fuerza Pública. Por eso invito a la ciudadanía a que reconozcamos que la mayoría de las marchas fueron pacíficas y a que rechacemos  la violencia y a los encapuchados que no representan a los marchantes. El protocolo se seguirá aplicando, para no tener que usar la represión, sino en ultima instancia. Cuando tengamos que proteger la vida de los ciudadanos, siempre tendrá que intervenir la Fuerza Pública”, agregó.    

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“Lo que tenemos que lograr es que poco a poco lo que brille en las protestas sean los reclamos legítimos de los ciudadanos. Que de lo que se hable sea de la preocupación  por los asesinatos de líderes sociales; por las chuzadas a políticos y periodistas; por las amenazas reiteradas de las tales Águilas Negras a los ciudadanos, y por el pliego del Comité Nacional de Paro”, dijo también.  

Según López, como parte de las lecciones del día, están la necesidad de contar con más gestores de convivencia para atender mejor los primeros pasos del protocolo y a estar mejor preparados, pues pese a que se tenía previsto que serían 11 los puntos de concentración al final fueron 20, lo que obligó a redoblar esfuerzos. “Seguiremos dispuestos a mejorar. Como balance puedo decir que hoy en la mayoría de los casos se resolvieron con diálogo y concertación”. 

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Al final, la alcaldesa le pidió a la Fiscalía que, frente a los tres judicializados, le esclareciera a la ciudadanía quién son esos encapuchados, a qué estructuras pertenecen y a qué propósito oscuro sirven.  “Mientras esto ocurre, a la administración no nos queda más que proteger la vida de los ciudadanos”, concluyó.  

A diferencia de la alcaldesa, la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, comenzó su intervención tras el balance final de la jornada aludiendo a los brotes de violencia en las manifestaciones. "Encontramos con profunda tristeza que son aprovechadas estas movilizaciones por vándalos que afectan el bienestar de los ciudadanos sobretodo cuando hay obstaculizaciones y afectaciones a los sistemas de transporte masivos, cuando hay bloqueos en la vía, cuando se atenta contra instalaciones privadas y públicas, esto genera gran malestar en la población porque en últimas quienes se están movilizando están generando con estos hechos violencia y desconociendo los derechos de quienes no participan, que quieren en su diario vivir tener la tranquilidad de movilizarse para llegar a sus lugares de trabajo", destacó.

El director de la Policía, general Óscar Atehortúa, detalló que se registraron manifestaciones en 103 municipios del país. De esta jornada, resultaron heridos diez uniformados, cinco en Bogotá, dos en Tunja y Medellín, y uno en Caldas.  "Los protocolos son claros y se están cumpliendo a cabalidad", aseguró.