Gobierno declara al Metro de Bogotá como proyecto de interés nacional y estratégico

Una vez más, el Gobierno Nacional le da un espaldarazo al metro elevado de la administración de Enrique Peñalosa. Esta vez al declararlo un proyecto de interés nacional y estratégico, a través la Comisión Intersectorial de Infraestructura y Proyectos Estratégicos (Ciipe), liderada por el presidente Juan Manuel Santos.

¿Qué significa esto? Que no solo será una de las prioridades del Gobierno, sino también que le ayudará al Distrito a agilizar los trámites y cumplir con los requisitos, para que la obra llegue a un feliz término.

Procesos de licencias ambientales, adquisición de predios y consultas previas son algunos de los trámites que se deben cumplir, pero que tardan mucho tiempo. Con este nuevo estatus, el proyecto contará con el apoyo de las entidades públicas, que deberán hacer un seguimiento juicioso para cumplir con los plazos establecidos y darles celeridad a los procesos.

Hace cuatro meses, la Nación ratificó su compromiso con la construcción de tres importantes megaobras para la movilidad de Bogotá y la región, en las que serán invertidos $15,2 billones. Tras un consejo de ministros, se firmó el documento Conpes en el que se definen como proyectos claves para la región las fases II y III de Transmilenio en Soacha, el Regiotram, o tren de cercanías, y el metro elevado. (Lea: Falta el Conpes clave para asegurar la plata del metro de Bogotá)

Esa decisión también ayudó al avance en la cadena de requerimientos y formalismos que se deben resolver para que la primera línea de esa obra pase del papel al cemento. Sin embargo, es necesario un nuevo Conpes, que es clave para asegurar los $9,6 billones que la Nación se comprometió a invertir en el proyecto. La firma de ese documento depende de que el Distrito le presente al Departamento Nacional de Planeación (DNP) los estudios detallados de la obra y su estructuración técnica, legal y financiera.

Ya se cumplió con los estudios de prefactibilidad, elaborados por la firma francesa Systra, en los que se propone un recorrido de 25 kilómetros y 15 estaciones, que saldría del portal de Las Américas y llegaría a la calle 72. En estos momentos, el consorcio Metro bog, conformado por Ingetec y Systra, adelantan los estudios de factibilidad. Una vez estén listos, el Gobierno podrá firmar un nuevo Conpes y, ahí sí, podrá abrirse una licitación. (Lea: Distrito da otro paso para “amarrar” la plata del metro)

Peñalosa calcula que sea a finales de este año y que en 2018 empiecen las obras en terreno. Mientras tanto, el Distrito, encabezado por la Empresa Metro, adelantará tareas como la compra de predios y la reubicación de las redes de servicios públicos que se atraviesan en el trayecto férreo, trámites que ahora serán más fáciles con esta declaración.

Una vez más, el Gobierno Nacional le da un espaldarazo al metro elevado de la administración de Enrique Peñalosa. Esta vez al declararlo un proyecto de interés nacional y estratégico, a través la Comisión Intersectorial de Infraestructura y Proyectos Estratégicos (Ciipe), liderada por el presidente Juan Manuel Santos.

¿Qué significa esto? Que no solo será una de las prioridades del Gobierno, sino también que le ayudará al Distrito a agilizar los trámites y cumplir con los requisitos, para que la obra llegue a un feliz término.

Procesos de licencias ambientales, adquisición de predios y consultas previas son algunos de los trámites que se deben cumplir, pero que tardan mucho tiempo. Con este nuevo estatus, el proyecto contará con el apoyo de las entidades públicas, que deberán hacer un seguimiento juicioso para cumplir con los plazos establecidos y darles celeridad a los procesos.

Hace cuatro meses, la Nación ratificó su compromiso con la construcción de tres importantes megaobras para la movilidad de Bogotá y la región, en las que serán invertidos $15,2 billones. Tras un consejo de ministros, se firmó el documento Conpes en el que se definen como proyectos claves para la región las fases II y III de Transmilenio en Soacha, el Regiotram, o tren de cercanías, y el metro elevado. (Lea: Falta el Conpes clave para asegurar la plata del metro de Bogotá)

Esa decisión también ayudó al avance en la cadena de requerimientos y formalismos que se deben resolver para que la primera línea de esa obra pase del papel al cemento. Sin embargo, es necesario un nuevo Conpes, que es clave para asegurar los $9,6 billones que la Nación se comprometió a invertir en el proyecto. La firma de ese documento depende de que el Distrito le presente al Departamento Nacional de Planeación (DNP) los estudios detallados de la obra y su estructuración técnica, legal y financiera.

Ya se cumplió con los estudios de prefactibilidad, elaborados por la firma francesa Systra, en los que se propone un recorrido de 25 kilómetros y 15 estaciones, que saldría del portal de Las Américas y llegaría a la calle 72. En estos momentos, el consorcio Metro bog, conformado por Ingetec y Systra, adelantan los estudios de factibilidad. Una vez estén listos, el Gobierno podrá firmar un nuevo Conpes y, ahí sí, podrá abrirse una licitación. (Lea: Distrito da otro paso para “amarrar” la plata del metro)

Peñalosa calcula que sea a finales de este año y que en 2018 empiecen las obras en terreno. Mientras tanto, el Distrito, encabezado por la Empresa Metro, adelantará tareas como la compra de predios y la reubicación de las redes de servicios públicos que se atraviesan en el trayecto férreo, trámites que ahora serán más fáciles con esta declaración.