Ojo: cuide sus pertenencias en estas estaciones de Transmilenio

A diario, los usuarios de Transmilenio se enfrentan a aglomeraciones que aprovechan los ladrones para hacer de las suyas. El último caso que la Policía puso en evidencia fue el de una mujer, detenida en el Portal Suba, que se dedicaba a robar celulares mediante la modalidad de cosquilleo. La detenida, mientras esperaba a que llegara una uniformada para requisarla, fue al baño e intentó deshacerse de al menos siete teléfonos. Las víctimas advirtieron la maniobra, y en ese momento fue puesta a disposición de las autoridades. (LEA: El prontuario de un mujer capturada por hurtar celulares en Transmilenio)

Es por eso que la Policía hace un llamado a los usuarios para que guarden bien sus pertenencias, especialmente dispositivos electrónicos y billeteras: los objetos más codiciados por los delincuentes en Transmilenio. Asimismo, les han pedido que denuncien para evitar que los robos queden en la impunidad. De hecho, según datos estadísticos de la Policía, entre enero y julio de este año crecieron un 20,3 % las quejas por hurto en las estaciones del sistema, al pasar de 710 en 2016 a 891 en 2017. (LEA: Apuñalan a mujer en la estación de la calle 106 de Transmilenio)

Aunque no todos los robos son puestos en conocimiento de las autoridades, las dos primeras estaciones que concentran el mayor índice de hurtos están en el centro de la ciudad: Ricaurte (calle 13) y Av. Jiménez, que presentaron 50 y 30 casos, respectivamente. Estos lugares están seguidos por los portales Américas y Norte, ambos con 27 casos cada uno. Y del quinto al décimo lugar se encuentran las de Calle 63, Banderas, Calle 100, Portal Suba, Alcalá y Portal del Sur, las cuales tuvieron entre 26 y 20 denuncias. Cada 36 horas es agredido un funcionario de TransMilenio por evitar colados

Para Luis Fernando Echavarría, experto en seguridad, el tema de las denuncias es bastante complejo. “En muchas ocasiones la gente se da cuenta cuando ya se bajó del sistema o, por ejemplo, cuando está en la casa. Entonces relacionar en dónde ocurrió el robo resulta difícil”.

El común denominador de estos lugares es que en horas pico hay una amplia afluencia de público. Es decir, los hurtos podrían guardar relación directa con las aglomeraciones. Así lo demuestran las estadísticas, que indican que 691 de los robos reportados este año (77,5 %) ocurrieron sin uso de armas. Las modalidades serían entonces cosquilleo, raponazo o factor de oportunidad (cuando los usuarios descuidan sus pertenencias). En el resto de casos, 134 denuncias fueron por hurtos con armas blancas; 62, con objetos contundentes; cinco, con arma de fuego, y dos, con escopolamina.

Otro dato clave es que, en las mañanas, entre las 4:00 a.m. y las 12:00 m. se registró la mayoría de casos (434). A su vez, entre la 1:00 p.m. y las 6:00 p.m. fueron 282, y a partir de esa hora hasta el cierre del sistema fueron 175. El jueves, con 166 casos, es el día en que se interpone la mayor cantidad de denuncias. Los domingos se registra el menor índice de robos (34).

No obstante, en comparación con 2016, se evidencia que el hurto a personas en TM -pese a guardar patrones- es cambiante y los delincuentes van variando sus sitios de operación. Por ejemplo, en el top 30 de las estaciones con más hurtos del año pasado se encontraba la estación de la Calle 57, donde se denunciaron 10 casos . Este año la cifra disminuyó a cinco. Lo mismo ocurre con la de la Calle 76, que también tuvo una reducción del 50 %, al pasar de 18 a 9.

La Policía cuenta con agentes encubiertos y uniformados en las estaciones para mitigar los hurtos. Por eso, con el Plan Mochila (labores de registro a los usuarios) y el Plan Guitarra (verificación de atencedentes y requisas en estaciones), de enero a julio lograron 1.137 capturas por distintos delitos (21 por orden judicial y 1.116 en flagrancia), 756 de los cuales fueron por hurto. Además, aseguran que lograron incautarse de 10.512 armas blancas y tres de fuego.

“Hay grupos organizados para robar, integrados por campaneros y personas que marcan a sus víctimas. También hay quienes aprovechan la oportunidad para sacar el celular o la billetera. Por eso hay que tener presente el tema del autocuidado. Ese es un problema que no sólo se presenta aquí, sino en cualquier parte del mundo en donde hay sistemas de transporte masivo”, indicó Echavarría, quien coincide con el llamado de las autoridades para denunciar, y de esta manera sea posible investigar y crear estrategias para enfrentar este flagelo.

A diario, los usuarios de Transmilenio se enfrentan a aglomeraciones que aprovechan los ladrones para hacer de las suyas. El último caso que la Policía puso en evidencia fue el de una mujer, detenida en el Portal Suba, que se dedicaba a robar celulares mediante la modalidad de cosquilleo. La detenida, mientras esperaba a que llegara una uniformada para requisarla, fue al baño e intentó deshacerse de al menos siete teléfonos. Las víctimas advirtieron la maniobra, y en ese momento fue puesta a disposición de las autoridades. (LEA: El prontuario de un mujer capturada por hurtar celulares en Transmilenio)

Es por eso que la Policía hace un llamado a los usuarios para que guarden bien sus pertenencias, especialmente dispositivos electrónicos y billeteras: los objetos más codiciados por los delincuentes en Transmilenio. Asimismo, les han pedido que denuncien para evitar que los robos queden en la impunidad. De hecho, según datos estadísticos de la Policía, entre enero y julio de este año crecieron un 20,3 % las quejas por hurto en las estaciones del sistema, al pasar de 710 en 2016 a 891 en 2017. (LEA: Apuñalan a mujer en la estación de la calle 106 de Transmilenio)

Aunque no todos los robos son puestos en conocimiento de las autoridades, las dos primeras estaciones que concentran el mayor índice de hurtos están en el centro de la ciudad: Ricaurte (calle 13) y Av. Jiménez, que presentaron 50 y 30 casos, respectivamente. Estos lugares están seguidos por los portales Américas y Norte, ambos con 27 casos cada uno. Y del quinto al décimo lugar se encuentran las de Calle 63, Banderas, Calle 100, Portal Suba, Alcalá y Portal del Sur, las cuales tuvieron entre 26 y 20 denuncias. Cada 36 horas es agredido un funcionario de TransMilenio por evitar colados

Para Luis Fernando Echavarría, experto en seguridad, el tema de las denuncias es bastante complejo. “En muchas ocasiones la gente se da cuenta cuando ya se bajó del sistema o, por ejemplo, cuando está en la casa. Entonces relacionar en dónde ocurrió el robo resulta difícil”.

El común denominador de estos lugares es que en horas pico hay una amplia afluencia de público. Es decir, los hurtos podrían guardar relación directa con las aglomeraciones. Así lo demuestran las estadísticas, que indican que 691 de los robos reportados este año (77,5 %) ocurrieron sin uso de armas. Las modalidades serían entonces cosquilleo, raponazo o factor de oportunidad (cuando los usuarios descuidan sus pertenencias). En el resto de casos, 134 denuncias fueron por hurtos con armas blancas; 62, con objetos contundentes; cinco, con arma de fuego, y dos, con escopolamina.

Otro dato clave es que, en las mañanas, entre las 4:00 a.m. y las 12:00 m. se registró la mayoría de casos (434). A su vez, entre la 1:00 p.m. y las 6:00 p.m. fueron 282, y a partir de esa hora hasta el cierre del sistema fueron 175. El jueves, con 166 casos, es el día en que se interpone la mayor cantidad de denuncias. Los domingos se registra el menor índice de robos (34).

No obstante, en comparación con 2016, se evidencia que el hurto a personas en TM -pese a guardar patrones- es cambiante y los delincuentes van variando sus sitios de operación. Por ejemplo, en el top 30 de las estaciones con más hurtos del año pasado se encontraba la estación de la Calle 57, donde se denunciaron 10 casos . Este año la cifra disminuyó a cinco. Lo mismo ocurre con la de la Calle 76, que también tuvo una reducción del 50 %, al pasar de 18 a 9.

La Policía cuenta con agentes encubiertos y uniformados en las estaciones para mitigar los hurtos. Por eso, con el Plan Mochila (labores de registro a los usuarios) y el Plan Guitarra (verificación de atencedentes y requisas en estaciones), de enero a julio lograron 1.137 capturas por distintos delitos (21 por orden judicial y 1.116 en flagrancia), 756 de los cuales fueron por hurto. Además, aseguran que lograron incautarse de 10.512 armas blancas y tres de fuego.

“Hay grupos organizados para robar, integrados por campaneros y personas que marcan a sus víctimas. También hay quienes aprovechan la oportunidad para sacar el celular o la billetera. Por eso hay que tener presente el tema del autocuidado. Ese es un problema que no sólo se presenta aquí, sino en cualquier parte del mundo en donde hay sistemas de transporte masivo”, indicó Echavarría, quien coincide con el llamado de las autoridades para denunciar, y de esta manera sea posible investigar y crear estrategias para enfrentar este flagelo.