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En una carta enviada por la Procuraduría al alcalde Enrique Peñalosa exige al Distrito tomar medidas urgentes y desarrollar todas las obras requeridas para el buen funcionamiento en el relleno sanitario Doña Juana.
>>> En contexto: El relleno Doña Juana no crecerá
El Ministerio Público enfatizó en agilizar los procesos sancionatorios ante los posibles riesgos medioambientales, que se suman a las afectaciones a los habitantes de los barrios cercanos, por lo que la carta también fue enviada a la superintendente de Servicios Públicos Domiciliarios, Natasha Avendaño Buendía, y el director de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA), Rodrigo Suárez.
Dentro de las advertencias, el ente de control le recordó al Distrito que la carencia del sistema de tratamiento de lixiviados y la recolección y evacuación de gases se deben a la falta de una planta para tratar los líquidos que genera la basura y de organización de la operación del relleno. Esto sería lo que provocó los derrumbes del relleno en 1995 y 2015.
“Las mencionadas problemáticas potencializan los impactos ambientales estimados para el proyecto, con incumplimientos de las normas sobre emisiones atmosféricas, calidad del aire y olores ofensivos, emitiendo sin el adecuado control, gases de efecto invernadero (causantes del calentamiento global)”, mencionó la Procuraduría.
El pasado lunes, el alcalde Peñalosa, en medio de la rencidión de cuentas que realizó en el Concejo, aseguró que ya cuentan con los estudios para ampliar 37 años la vida útil del relleno sanitario. Dentro de este proyecto, que fue discutido con los habitantes del Mochuelo Alto y Bajo, se determinó que no se ampliará el relleno sino que se optimizará el existente, habilitando espacios que ya habían sido sellados.
Esta solución es una de las que se ha dado luego de que se conociera el estudio de la Universidad Nacional en el que se determinó que no existe otro predio en la ciudad, en la que se pueda crear un nuevo relleno sanitario. Además, hay que tener en cuenta, que la licencia ambiental de Doña Juana finaliza en 2022, por lo que se debe dar una solución urgente.
Frente a las problemáticas que ha tenido el relleno en los últimos cuatro años, la Procuraduría recomendó definir un cronograma detallado para optimizar la Planta de Tratamiento de Lixiviados y así cumplir los parámetros normativos de vertimientos; así como adelantar actividades que contribuya a la reducción, recuperación y reciclaje de los materiales aprovechables.
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Por -Redacción Bogotá -bogota@elespectador.com
