Registran, por primera vez, un agujero de la capa de ozono sobre el Ártico
Las imágenes, publicadas en el portal de NASA Ozone Watch, revelaron que la concentración de ozono en la atmósfera disminuyó en un 90%, pero en las próximas semanas, el agujero que mide seis millones de kilómetros, se contraerá y desaparecerá.
- Agencia Europa Press
Por primera vez se registró un agujero en la capa de ozono. El inusual hecho se presentó en la parte central del Ártico, al parecer, fue producto de condiciones meteorológicas especiales. Las imágenes, publicadas en el portal de NASA Ozone Watch, revelaron que la concentración de ozono en la atmósfera disminuyó en un 90%, pero en las próximas semanas, el agujero que mide seis millones de kilómetros, se contraerá y desaparecerá. (Puede leer: El hielo marino más antiguo y grueso del Ártico está desapareciendo rápidamente)
Las condiciones meteorológicas han llevado a temperaturas estratosféricas por debajo de -80 grados Celsius. Por lo tanto, debido a la luz solar y la química, se observan valores de ozono muy bajos. Normalmente, la estratosfera sobre el Ártico es muy cálida y el vórtice polar demasiado inestable para que se den las condiciones registradas ahora, informa AC SAF, la instalación de aplicaciones satelitales para el monitoreo de la composición atmosférica de EUMETSAT.
Los instrumentos a bordo de los satélites de observación meteorológica en órbita polar Metop fueron los encargados de detectar el 'mini' agujero en la capa de ozono sobre el Ártico durante el pasado mes de marzo de 2020, con una dramática pérdida en la estratosfera del 30% de este gas en la vertical del Polo Norte. (Le puede interesar: Científicos, alarmados porque el paisaje del Ártico es cada vez más verde)
Las zonas bajo este agujero de la capa de ozono están expuestas a una mayor radiación ultravioleta. El agujero de la capa de ozono en la Antártida se intensificó hace décadas por las emisiones industriales de gases CFC que destruyen el ozono. La prohibición de estos compuestos en el Protocolo de Montreal en 1989 ha permitido que ese fenómeno disminuya en la actualidad.
Los científicos explican que la probabilidad de que un agujero de ozono se mueva desde el Ártico hacia latitudes bajas y áreas pobladas dentro de las próximas semanas es baja. El tamaño del agujero disminuirá cuando el sol se eleve gradualmente sobre el Polo Norte, lo que producirá que la temperatura del aire aumente y el vórtice polar empiece a decaer. (Lea también: Incendios forestales en el Ártico, otra alerta mundial)
Por primera vez se registró un agujero en la capa de ozono. El inusual hecho se presentó en la parte central del Ártico, al parecer, fue producto de condiciones meteorológicas especiales. Las imágenes, publicadas en el portal de NASA Ozone Watch, revelaron que la concentración de ozono en la atmósfera disminuyó en un 90%, pero en las próximas semanas, el agujero que mide seis millones de kilómetros, se contraerá y desaparecerá. (Puede leer: El hielo marino más antiguo y grueso del Ártico está desapareciendo rápidamente)
Las condiciones meteorológicas han llevado a temperaturas estratosféricas por debajo de -80 grados Celsius. Por lo tanto, debido a la luz solar y la química, se observan valores de ozono muy bajos. Normalmente, la estratosfera sobre el Ártico es muy cálida y el vórtice polar demasiado inestable para que se den las condiciones registradas ahora, informa AC SAF, la instalación de aplicaciones satelitales para el monitoreo de la composición atmosférica de EUMETSAT.
Los instrumentos a bordo de los satélites de observación meteorológica en órbita polar Metop fueron los encargados de detectar el 'mini' agujero en la capa de ozono sobre el Ártico durante el pasado mes de marzo de 2020, con una dramática pérdida en la estratosfera del 30% de este gas en la vertical del Polo Norte. (Le puede interesar: Científicos, alarmados porque el paisaje del Ártico es cada vez más verde)
Las zonas bajo este agujero de la capa de ozono están expuestas a una mayor radiación ultravioleta. El agujero de la capa de ozono en la Antártida se intensificó hace décadas por las emisiones industriales de gases CFC que destruyen el ozono. La prohibición de estos compuestos en el Protocolo de Montreal en 1989 ha permitido que ese fenómeno disminuya en la actualidad.
Los científicos explican que la probabilidad de que un agujero de ozono se mueva desde el Ártico hacia latitudes bajas y áreas pobladas dentro de las próximas semanas es baja. El tamaño del agujero disminuirá cuando el sol se eleve gradualmente sobre el Polo Norte, lo que producirá que la temperatura del aire aumente y el vórtice polar empiece a decaer. (Lea también: Incendios forestales en el Ártico, otra alerta mundial)