ONU verificaría cese al fuego con disidencia, ¿qué se puede aprender de proceso con ELN?

Carlos Ruiz Massieu es el representante especial del secretario general de Naciones Unidas en Colombia. / Gustavo Torrijos

Foto: GUSTAVO TORRIJOS

El miércoles la Misión de Verificación de la ONU en Colombia presentó ante el Consejo de Seguridad de ese organismo en Nueva York su más reciente informe trimestral sobre la implementación del Acuerdo de Paz de 2016.

Tras ese evento, el representante de la Misión, Carlos Ruiz Massieu, dio una rueda de prensa virtual donde amplío algunos hallazgos del informe y habló sobre las negociaciones que adelanta el Gobierno de Gustavo Petro, los avances del alto al fuego con el ELN, la posibilidad de que haya una Alta Consejería para la implementación del Acuerdo de Paz de 2016 y las preocupaciones de algunos países miembro del Consejo de Seguridad.

El presidente Petro dijo este miércoles que el programa de sustitución de cultivos (PNIS) del gobierno del expresidente Juan Manuel Santos fue “un antro de corrupción” y que los recursos destinados para ello no llegaron a las comunidades. Este es uno de los puntos del Acuerdo de Paz, ¿cómo reacciona la ONU a estas afirmaciones?

No tenemos un mandato específico en este tema y quien le daba un seguimiento puntual es la Oficina de Naciones Unidas de las Drogas y el Delito, pero al ser un elemento integrante del Acuerdo de Paz, pues obviamente tenemos una apreciación del tema.

Yo creería que desde el inicio de su implementación tuvo varios elementos positivos. Se inscribió un número importante de familias, creo que eran 90 mil y se erradicó un número importante de hectáreas. Se les pagó un estipendio a las familias que entraron al programa para su manutención en la etapa en la que se proveía el proyecto alternativo de vida y fue la etapa tercera, la que sufrió más en cuanto a la llegada de ese proyecto, lo que empezó a generar un poco más de problemas en su implementación.

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Desafortunadamente en estos programas -y aquí voy a ser genérico porque seguramente habrá diferentes elementos de valoración dependiendo la zona o la región-, uno de los retos adicionales es que faltó un poco más de preparación. Las dinámicas en materia de tener un cultivo alternativo tuvieron desafíos como que eran en zonas con poca infraestructura, con poco acceso a mercados, además del hecho proveer un cultivo alternativo que tuviera viabilidad futura en la parte comercial. Lo que entiendo es que ahora esta administración quiere hacer una evaluación de esta experiencia y tratar de proponer algunas variaciones para que el programa pueda funcionar de mejor manera.

Los jefes de las delegaciones de Gobierno y ELN dijeron el martes que cuando se cumplan los tres meses del cese al fuego habrá un informe robusto por parte del Mecanismo de Monitoreo y Verificación (MMV). ¿Este documento será público o solo para la mesa como los informes del MMV?

El informe que se espera de los tres meses es muy importante al interior de las discusiones porque es cuando la mesa va a hacer una evaluación de cómo ha venido funcionando y si hay que hacer ajustes y sobre todo cómo se han prevenido y resuelto incidentes que es uno de los valores más importantes del propio mecanismo.

Al interior del mecanismo tienen que discutir qué tipo de información va a darse. Es decir, si este será informe público o si debe proporcionar otro a la opinión pública, a los medios de comunicación, para que la sociedad en su conjunto pueda tener elementos y también transparencia sobre cómo ha venido funcionando el mecanismo.

No puedo dar una respuesta concreta. El informe sí sé que su naturaleza es interna, pero estoy seguro que las cuatro partes, es decir, las dos partes de la mesa más la Iglesia más Naciones Unidas, van a hacer una discusión para ver qué información se puede dar porque es importante que se mantenga informada a la sociedad en su conjunto.

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¿Qué se puede aprender del cese al fuego con el ELN con el que puede empezar con la disidencia de las antiguas FARC autodenominada como Estado Mayor Central (EMC)?

Para el Consejo de Seguridad fue muy importante tanto el acuerdo del cese al fuego como la solicitud de las partes para el monitoreo y verificación, como todos los protocolos. Eso es algo que puede servir para que el camino que se siga en el caso del EMC sea similar. Tengo entendido que las partes de ese proceso próximamente enviarán una petición al Consejo de Seguridad para que la Misión de Verificación de la ONU en Colombia seamos parte de ese mecanismo. Ese es el camino que ha funcionado con el Consejo de Seguridad, que a nuestro juicio se debería seguir.

Otro aprendizaje que hemos tenido es que cada documento que se va aprobando en ese proceso, las partes han pedido que sea de conocimiento del Consejo para que conozcan de primera mano que están pasando al interior de las negociaciones.

Decía en su intervención ante el Consejo de Seguridad, el representante Estados Unidos dijo que antes de que el Consejo de Seguridad apoye un nuevo mandato para monitorear el cese al fuego con el EMC se deberían surtir varias rondas y que ese proceso todavía no ha llegado a un punto de maduración. ¿Qué es lo que espera el Consejo de Seguridad o que se necesita para que ese mandato sobre el monitoreo del EMC pueda tener su aval?

No podría decir exactamente qué es lo que Estados Unidos espera, pero una de las cosas es precisamente los avances en los protocolos del cese, el acuerdo de cese, la petición formal al Consejo de Seguridad, que son parte, no solamente de la formalidad, sino del compromiso de las partes para llegar a acuerdos. Creo que se mencionó en la discusión en el Consejo —no sé si fue Estados Unidos u otros representantes— el tema de la estructura arquitectura robusta de países que rodean estos procesos. Ese es un elemento importante que en el caso del ELN hay países garantes tanto de la región como fuera de la región, como el caso de Noruega.

En el caso del EMC, también hay una serie de países que han estado acompañando, todavía no está en algunos de ellos la formalidad de ser garantes, pero yo entiendo que hay unas discusiones andando. Entonces puede ser que sean esos elementos que le dan un poco más de estructura robusta.

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El representante de Estados Unidos también dijo que hay una preocupación por esos informes que señalan que el 40% del ELN no estaría de acuerdo con este proceso de paz. ¿Desde la ONU han visto alguna preocupación frente a estos informes y cómo reciben este pronunciamiento de un país como Estados Unidos?

Es muy importante el apoyo que tenemos del Consejo de Seguridad tanto para verificar el cese al fuego con el ELN, como el apoyo moral político que tenemos de ser parte de esta mesa de diálogos desde el día uno. Entonces ahí yo creo que está expresado el apoyo de todos los países miembros del Consejo.

Ahora dentro de ese apoyo y esa confianza que hay tanto en el proceso como en el cese, pues cada uno de los países miembros del Consejo pueden tener preocupaciones coyunturales o eventuales por información que reciben de diferentes fuentes y es natural. Lo importante es que el propio proceso es el que le dé seguridad tanto al interior de Colombia, a los miembros del Consejo, también a nosotros de que estamos en camino correcto y se van digamos eliminando esas preocupaciones. Perro hay que confiar que ese proceso va a ir disminuyendo esas dudas.

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La representante del Reino Unido pidió que se cree “rápidamente” una oficina, junto con la Presidencia, para que siga la implementación del Acuerdo de Paz. Esto tiene que ver con el plan del Gobierno de eliminar a la Unidad de Implementación y volverla a convertir en una Alta Consejería Presidencial. ¿El Consejo ha sabido más detalles de esta propuesta por el informe de la Misión? ¿Se ha instado al Gobierno para que este cambio se dé pronto?

El presidente Petro anunció que era una decisión de parte de él restituir, por decirlo de alguna manera, esa Alta Consejería para la implementación del Acuerdo que ha tenido muchos nombres en los diferentes gobiernos para dividir la parte de diálogos de paz y todas las funciones que tiene el Alto Comisionado respecto a la implementación del acuerdo de 2016. Eso lo anunció hace ya unos meses.

El Consejo de Seguridad sí tiene información a través del informe no solo de este último, sino del anterior. Es algo que el propio Consejo de Seguridad celebró y creo que es una decisión sabia el separar estas funciones, pero no se ha materializado.

No sé si se elimine a la Unidad de Implementación del Acuerdo de Paz o si se aparte de esa nueva estructura, la verdad es que desconozco ese tipo de detalles, pero sí se refiere a eso porque se valora mucho desde la comunidad internacional esa decisión del presidente Petro dada la importancia que tiene la implementación -complementada con los diálogos existentes dentro de la política que tiene el presidente del Paz Total-.

Es importante tener una entidad de ese nivel jerárquico, dedicada a eso, y que pueda coordinar los esfuerzos de diferentes entidades de gobierno. Se está a la espera de eso y hay esas palabras de aliento para que se tomen las decisiones lo más pronto posible, porque eso va a incidir en acelerar la implementación y hacer un esfuerzo de manera articulado para que esto siga avanzando como ahora o más rápido en diferentes aspectos.