Un bebé de 1 año y 4 meses falleció tras caer en un balde de agua en su hogar, ubicado en el barrio 7 de Agosto, en Santo Tomás, Atlántico. Los padres del niño, identificado como Carlos David Ferrero, no se encontraban en la casa y estaba bajo el cuidado de una mujer que también realizaba labores domésticas.
De acuerdo con los primeros reportes, la cuidadora informó que lo supervisaba de forma intermitente, mientras realizaba aseo. Perdió de vista al niño, por lo que al notar su ausencia, comenzó a buscarlo por la casa y, tras varios minutos, lo encontró en el patio, sumergido en un balde de agua.
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La mujer pidió ayuda a los vecinos, quienes rápidamente trasladaron al niño al hospital Santo Tomás, pero al llegar al centro de salud, los médicos confirmaron que el menor de edad ya no presentaba signos vitales.
Las autoridades locales lamentaron lo sucedido y reiteraron el llamado a los padres y los cuidadores de tener más precauciones al supervisar a menores de edad, sobre todo en entornos donde objetos comunes, pueden representar un riesgo para su seguridad.
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Un hecho similar ocurrió hace un mes, en el corregimiento de La Loma de Calenturas, Cesar, donde una niña de un año y tres meses murió tras caer en un balde de forma accidental mientras su madre lavaba ropa en el patio de la casa.