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Tras la decisión del Juez Tercero del Circuito de Santa Marta, Jairo Villalba de Ángel, de otorgar detención domiciliaria a Enrique Vives Caballero, quien causó la muerte de seis jóvenes el 13 de septiembre, los familiares de las víctimas han señalado que se trata de una burla para las víctimas.
“No es posible que alguien mate a seis personas y pague por lo que hizo en las comodidades de su casa. Es una falta de respeto para con nosotros. Si lo hubiera hecho yo o usted, seguramente estuviéramos más que presos”, le dijo al diario El Heraldo Jair Romero, padre de los hermanos Camila de 18 años y Leonir de 17 años, quienes fallecieron en el siniestro.
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Familiares de otras víctimas también han manifestado su inconformidad frente a la decisión que revocó la medida de aseguramiento en establecimiento carcelario a Vives Caballero. El empresario que conducía en estado de embriaguez cuando provocó el accidente en el que seis jóvenes murieron y uno más resultó herido, se encontraba recluido en la cárcel La Ternera, ubicada en Cartagena. Ahora, bajo supervisión del Inpec será trasladado a su lugar de residencia en Santa Marta.
El Juzgado Tercero de Santa Marta señaló que la detención preventiva se mantiene, debido a la posibilidad de que con su libertad, Enrique Vives continúe conduciendo en estado de embriaguez y poniendo en riesgo a otras personas.
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Enrique Vives es un reconocido empresario y político de la región que incluso fue candidato al concejo de Santa Marta en 2015 por el movimiento ‘Otra Santa Marta es posible’. De acuerdo con información de medios regionales, Vives también es uno de los propietarios de la empresa Bananitas S.A.S. y propietario del reconocido restaurante Marmi, ubicado en el centro comercial Prado Plaza.