Cinco personas fueron asesinadas el fin de semana en Buenaventura

Entre los asesinatos que se registraron se encuentra el de dos mujeres.

Foto: Archivo

Un fin de semana violento se vivió en Buenaventura (Valle del Cauca). Cinco personas fueron asesinadas en hechos aislados. El viernes, 4 de marzo, fueron asesinados Reinaldo Antanela Ruiz, Oslen Torres y Nubia Rodríguez, mientras que el sábado se registró el homicidio de a José Héctor Caicedo, y el domingo a Aydee Cuero Murillo.

Aunque los hechos aún son materia de investigación, de los asesinatos registrados el viernes 4 de marzo, se ha dado a conocer que fueron con armas de fuego. En el caso de Reinaldo Ruíz, de 28 años, sujetos que se movilizaban en una motocicleta lo abordaron y le dispararon. Aunque Ruiz fue trasladado al hospital Luis Ablanque de la Plata, perdió la vida. Por su parte, Oslen Torres Casas, un joven, que según información local, era mototaxista, fue asesinado en el barrio Viento Libre.

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El asesinato de Nubia Rodríguez Cerón, una mujer de 52 años, ocurrió en la zona rural de Buenaventura, en el corregimiento Sabaletas. “Ingresan a la tienda de la que ella era propietaria dos personas y haciendo uso de armas de fuego, le propinan dos impactos e inmediatamente fallece. Con personal de la Armada Nacional llegamos hasta el sitio para realizar la inspección al cadáver y recogimos un material probatorio que encontramos en la escena”, dijo a BLU Radio el coronel Ángel Acosta, comandante de la Policía.

El sábado, 5 de marzo, sobre las 7:30 a.m., fue asesinado José Héctor Caicedo, de 51 años en el barrio Bahía de Buenaventura, tras recibir varios impactos de bala. Mientras que el domingo, falleció Aydee Cuero Murillo, docente de 47 años, quien fue agredida con arma blanca, al parecer, por un sobrino. El hecho se registró en el barrio Juan XXIII. Primeras versiones indican que el hombre estaba discutiendo con su pareja, pero Aydee habría intervenido y por eso la habría herido.

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Aunque las autoridades investigan los hechos, cabe resaltar que Buenaventura se ha convertido en un epicentro de violencia debido a los diferentes grupos armados ilegales que hacen presencia en la zona rural, como el Eln y las Agc, que mantienen una confrontación en el norte del municipio, y las bandas organizadas, Los Shotas y Los Espartanos, que mantienen una lucha por el control de las rentas ilegales en el casco urbano.