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La Unidad de Restitución de Tierras aseguró que víctimas del conflicto han recuperado sus tierras luego de ser blanco, en los años 90, de hostigamientos, tortura y reclutamiento forzado por parte de la guerrilla de las Farc en los llanos orientales y que debido al pánico generado por la masacre de Mapiripán, no pudieron retornar a sus tierras.
Los fallos determinan que dos familias reclamantes de tierras, una de ellas debido a que el predio se encuentra en zona de riesgo geográfico y la segunda, por afectación psicológica, deben ser compensadas.
El director General de la Unidad de Restitución de Tierras, Ricardo Sabogal Urrego, dijo que estas sentencias son la muestra del rigor con que la Restitución de Tierras lleva la justicia a las zonas más afectadas por la violencia en el país.
“Ratificamos el compromiso del Estado con los campesinos que sufrieron los vejámenes del conflicto armado. El caso de Mapiripán dejó huella en todo el país y hoy, con estos fallos, el Estado garantiza la restitución integral de sus derechos. Así le estamos cumpliendo a las víctimas a lo largo y ancho del territorio, porque nuestro compromiso es con la reconciliación de Colombia”, aseguró.
La masacre de Mapiripán, perpetrada por las AUC, desafió la autoridad histórica que venían ejerciendo las Farc en la zona, que dejó al descubierto la alianza entre las Autodefensas de Urabá, a la cabeza de Carlos Castaño Gil, y la de los Llanos Orientales, lideradas por alias ‘Martín Llanos’.
Por otro lado, se conoció que los desplazados de este hecho, que residen en Villavicencio y en otros municipios del Meta, han sido víctimas de amenazas en los últimos días por lo que la Unidad para las Víctimas trabajará de manera conjunta con la Unidad Nacional de Protección para proteger la vida e integridad de estas personas.