María Ángel Molina, niña de 4 años desaparecida, fue hallada muerta en Aguadas, Caldas
La pequeña estaba desaparecida desde el pasado domingo 10 de enero. El atacante de la menor confirmó ante la Fiscalía que la había arrojado a un río.
Este miércoles fue hallado el cuerpo de María Ángel Molina Tangarife, una niña de cuatro años que había desparecido el pasado domingo 10 de enero en Aguadas, Caldas. Fue encontrado en Arma, un corregimiento del municipio, luego de que el responsable de haberla raptado confesara que la había lanzado al río que lleva el mismo nombre que el corregimiento.
“El cuerpo fue encontrado en la desembocadura del río Arma, en la desembocadura con el río Cauca, a unos 18 kilómetros del lugar donde presuntamente fue dejada abandonada por este sujeto”, aseguró el coronel Eiver Alonso.
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Desde que se reportó la desaparición de la menor en el sector de Plan del Oro, las autoridades iniciaron a buscarla por vías aéreas, terrestres y acuáticas. Según las primeras informaciones, el cuerpo de la niña fue encontrado gracias a un dron.
María Ángel fue raptada con su hermana de tan solo 18 meses, quien fue rescatada por las autoridades unas horas después. La madre de las menores continúa en el hospital recuperándose de una cirugía por las heridas que recibió el día en que fueron secuestradas ambas niñas.
El padre de la menor, Jhon Faber Molina, quien pertenece al cuerpo de bomberos del municipio de Aguadas, participó durante todas las labores de búsqueda junto con sus compañeros de profesión.
“En el componente de búsqueda participaron más de 80 personas entre, policías, Ejército, Defensa Civil, bomberos, el grupo especializado de Búsqueda y Rescate de la Policía Nacional (Ponalsar), quienes con los caninos y ayuda de los pilotos de los drones lograron hallar el cuerpo de la niña”, afirmó el coronel de la Policía.
Desde la mañana, la tía de la menor, Yenny Bibiana González Tangarife, confirmó que en este sector había encontrado zapatos y ropa pertenecientes a la niña. Debido a esto y a la confesión del secuestrador, las autoridades incrementaron la búsqueda en la zona hasta dar con el paradero del cuerpo de la niña.
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Por el momento las autoridades no han confirmado si se trató de un acto de abuso sexual o tortura, aunque tanto la Sijín como Medicina Legal están inspeccionando el cuerpo para establecer si la menor de edad fue víctima de alguno de esos delitos. El presunto asesino está en manos de la Fiscalía y es interrogado para establecer su responsabilidad en el caso.
Este miércoles fue hallado el cuerpo de María Ángel Molina Tangarife, una niña de cuatro años que había desparecido el pasado domingo 10 de enero en Aguadas, Caldas. Fue encontrado en Arma, un corregimiento del municipio, luego de que el responsable de haberla raptado confesara que la había lanzado al río que lleva el mismo nombre que el corregimiento.
“El cuerpo fue encontrado en la desembocadura del río Arma, en la desembocadura con el río Cauca, a unos 18 kilómetros del lugar donde presuntamente fue dejada abandonada por este sujeto”, aseguró el coronel Eiver Alonso.
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Desde que se reportó la desaparición de la menor en el sector de Plan del Oro, las autoridades iniciaron a buscarla por vías aéreas, terrestres y acuáticas. Según las primeras informaciones, el cuerpo de la niña fue encontrado gracias a un dron.
María Ángel fue raptada con su hermana de tan solo 18 meses, quien fue rescatada por las autoridades unas horas después. La madre de las menores continúa en el hospital recuperándose de una cirugía por las heridas que recibió el día en que fueron secuestradas ambas niñas.
El padre de la menor, Jhon Faber Molina, quien pertenece al cuerpo de bomberos del municipio de Aguadas, participó durante todas las labores de búsqueda junto con sus compañeros de profesión.
“En el componente de búsqueda participaron más de 80 personas entre, policías, Ejército, Defensa Civil, bomberos, el grupo especializado de Búsqueda y Rescate de la Policía Nacional (Ponalsar), quienes con los caninos y ayuda de los pilotos de los drones lograron hallar el cuerpo de la niña”, afirmó el coronel de la Policía.
Desde la mañana, la tía de la menor, Yenny Bibiana González Tangarife, confirmó que en este sector había encontrado zapatos y ropa pertenecientes a la niña. Debido a esto y a la confesión del secuestrador, las autoridades incrementaron la búsqueda en la zona hasta dar con el paradero del cuerpo de la niña.
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Por el momento las autoridades no han confirmado si se trató de un acto de abuso sexual o tortura, aunque tanto la Sijín como Medicina Legal están inspeccionando el cuerpo para establecer si la menor de edad fue víctima de alguno de esos delitos. El presunto asesino está en manos de la Fiscalía y es interrogado para establecer su responsabilidad en el caso.