Si sientes que llevas meses saliendo con alguien, compartiendo tiempo juntos y hasta teniendo gestos de pareja, pero nunca han hablado de qué son ni hacia dónde van, es posible que estés en una situationship. Aunque para algunas personas este tipo de relación funciona, para otras puede generar incertidumbre y una sensación de estar estancado emocionalmente.
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Sigue a Cromos en WhatsApp¿Cómo saber si esto es lo que estás viviendo? Estas son algunas señales.

No hay nada de malo en disfrutar de una conexión sin etiquetas si eso es lo que ambas personas desean, pero si estás buscando estabilidad emocional, es importante reconocer cuándo una situationship se ha convertido en un freno en tu vida sentimental. La clave está en saber qué quieres y tener la valentía de buscarlo.
1. Nunca han hablado de “nosotros”
Uno de los principales signos de una situationship es la falta de claridad en el estatus de la relación. No han tenido “la charla” sobre qué son, si están saliendo de manera exclusiva o si existe un futuro juntos. Cuando intentas abordar el tema, la otra persona cambia de conversación, evade o responde con frases como “me gusta cómo estamos, sin etiquetas”.
2. Se ven cuando es conveniente, pero sin planes a futuro
En una relación seria, hay planificación y ganas de construir algo juntos. En una situationship, los encuentros son espontáneos, sin mucho esfuerzo ni intención de incluirse en la vida del otro. Pueden verse cada semana o cada tanto, pero rara vez hay un “hagamos esto en un mes” o “quiero presentarte a mis amigos/familia”.
3. La conexión es fuerte, pero falta profundidad
Puede haber química, atracción y buenos momentos juntos, pero en el fondo sientes que no sabes mucho sobre la otra persona. Se hablan de cosas superficiales, pero evitan conversaciones más profundas sobre emociones, miedos o expectativas.
4. No formas parte de su círculo social o familiar
Si llevan tiempo conociéndose y nunca has sido presentado a sus amigos o familia, es una señal de alerta. Alguien que ve un futuro contigo buscará integrarte en su vida, mientras que en una situationship, lo más probable es que los encuentros sean siempre en privado o en entornos muy controlados.
5. Las cosas no avanzan, pero tampoco terminan
A diferencia de una relación tradicional que evoluciona o se disuelve, una situationship se mantiene en una especie de limbo. No hay peleas ni rupturas formales, pero tampoco hay compromiso ni avance real. Estás atrapado en una zona de confort emocional donde las cosas siguen igual sin definición.
¿Qué hacer si te das cuenta de que estás en una situationship?
Si este tipo de dinámica te incomoda, lo mejor que puedes hacer es poner las cartas sobre la mesa. Expresa lo que sientes y lo que esperas de la relación. Si la otra persona no está dispuesta a definir o comprometerse, tendrás que decidir si quieres seguir en esta ambigüedad o dar un paso al costado para encontrar algo más alineado con tus expectativas.
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