Aprende a hacer un limpiavidrios para dejar tus ventanas y espejos como nuevos

Las ventanas de la cocina y los espejos del baño son algunas de las superficies más susceptibles a engrasarse o llenarse de polvo, suciedad o agua.

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Seguramente crees que un limpiavidrios logra solucionar tu problema, sin embargo, existen muchísimos productos en el mercado, pero no todos son efectivos y si los has probado sabrás que muchas de estas opciones pueden llegar a ser muy costosos y a dejar “pegotes” o a engrasar las superficies doblemente.

Pero no debes temer, existen otras soluciones para esto, más económicas y que incluso podrían servirte para otras zonas y para limpiar otros rincones difíciles de tu hogar. Hoy te traemos una muy fácil de hacer y extremadamente efectiva, esta solución puede ser excelente si se trata de limpiar la casa con opciones naturales, muy económicas y sencillas que salen desde la propia cocina.

Así puedes hacer un limpiavidrios casero

Para que tus vidrios y espejos queden impecables necesitas:

· ¼ de taza con agua

· ¼ de taza con vinagre blanco

· Jabón líquido para lavar platos (opcional)

· Botella con atomizador

· Trapo suave o camiseta de algodón que ya no uses

· Papel periódico (este ingrediente es opcional)

Proceso para preparar y usar tu limpiavidrios casero con elementos de tu cocina

1. Mezcla el ¼ de taza con agua, ¼ de taza con vinagre blanco y un poco del jabón biodegradable para lavar platos en un balde. Asegúrate de que todo quede muy bien mezclado, y de no excederte en jabón, con solo una gota de jabón basta. La ventaja de usar vinagre es que cortará la grasa con sus propiedades limpiadoras y en caso de agregar un poco de jabón podrás arrasar con toda mancha o aspecto de suciedad.

Los vidrios tienden a ser uno de los más difíciles de limpiar, expuestos siempre al polvo y la suciedad.

Fotografía por: Pixabay

2. Luego de mezclarlo y tener todos los ingredientes en una única mezcla integrada, vierte todo en una botella con atomizador. Rocía los vidrios y espejos y deja actuar por unos 3 minutos, después frota con una camiseta o con el trapo húmedo que escogiste.

3. Después puedes frotar la superficie con papel de periódico para hacer que los vidrios brillen. En este paso, ya estarán más que limpios y libres de esas manchas de grasa o suciedad.

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