Mantener el congelador limpio y desinfectado es esencial para garantizar la seguridad alimentaria y prolongar la vida útil de los alimentos almacenados.
Aunque los congeladores son comúnmente utilizados para almacenar alimentos crudos y cocidos, así como para hacer hielo, es importante tener en cuenta que los microorganismos pueden crecer y multiplicarse en el interior del congelador si no se mantiene adecuadamente.
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Según Gastrolab, las recomendaciones claves de los expertos incluyen limpiar periódicamente el refrigerador, es decir que corrobores que la fecha de caducidad y el tiempo que lleva en tu nevera la comida, sean sanos, para evitar el riesgo de contaminación. Si lo dudas y algo tiene mal olor o el congelador está demasiado congelado, probablemente ya es momento de botar cosas y de hacer este procedimiento.
Pasos que puedes seguir para desinfectar el congelador:
Aquí te explicaremos cómo desinfectar el congelador de manera efectiva para garantizar tu salud y la seguridad de tus alimentos refrigerados.
Prepara el congelador y descongela:
Primero, vacía el congelador por completo, desconecta el suministro eléctrico y deja que el hielo se derrita si hay acumulación de escarcha en las paredes.
Mantener el congelador limpio y desinfectado es esencial para garantizar la seguridad alimentaria y prolongar la vida útil de los alimentos almacenados.
Limpia y elimina la suciedad:
Luego, retira todos los estantes, cajones y cualquier otra pieza removible del congelador y lávalos con agua caliente y jabón suave. Si hay manchas difíciles o acumulación de grasa, puedes usar una solución de bicarbonato de sodio y agua o un limpiador especial para electrodomésticos.
Desinfecta:
Para desinfectar el interior del congelador, puedes usar una solución de agua y vinagre blanco. Mezcla partes iguales de agua y vinagre en un recipiente y sumerge una esponja o paño limpio en la solución. Limpia el interior del congelador con la esponja o paño, asegurándote de llegar a todas las áreas, incluidas las esquinas y los bordes.
Enjuaga y seca:
Después de limpiar y desinfectar el congelador, enjuaga todo con agua limpia y seca el interior del congelador con una toalla o paño limpio. Asegúrate de que no haya agua en el congelador antes de volver a colocar los estantes y cajones.
Reorganiza tus alimentos:
Finalmente, vuelve a colocar todos los elementos y enchufa el congelador para volver a la temperatura adecuada. No olvides hacer hielo nuevamente.
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