Estos ingredientes de cocina te ayudarán a eliminar malos olores de tu habitación

El aroma de nuestro entorno puede tener un impacto significativo en nuestro estado de ánimo y bienestar general. Los malos olores en la habitación pueden ser desagradables y afectar negativamente nuestro ambiente hogareño.

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Afortunadamente, puedes hacer un ambientador casero fácil y efectivo utilizando menta y alcohol. La frescura de la menta combinada con las propiedades desodorantes del alcohol te ayudará a mantener tu habitación con un aroma agradable y libre de malos olores. A continuación, te presentamos una sencilla receta para crear tu propio ambientador casero.

Esto necesitas para hacer tu ambientador casero con menta

· Un frasco de vidrio con atomizador

· Hojas de menta fresca o aceite esencial de menta

· Alcohol

· Agua destilada

1. Prepara el frasco de vidrio

Comienza seleccionando un frasco de vidrio con pulverizador que sea lo suficientemente grande como para contener la mezcla del ambientador. Asegúrate de que el frasco esté limpio y seco antes de comenzar.

2. Agrega las hojas de menta o aceite esencial

Si utilizas hojas de menta fresca, asegúrate de lavarlas bien y secarlas antes de añadirlas al frasco. Coloca las hojas dentro del frasco hasta llenarlo aproximadamente un tercio de su capacidad. Si prefieres utilizar aceite esencial de menta, añade de 10 a 15 gotas al frasco.

3. Añade el alcohol

El alcohol es un excelente desodorante natural debido a sus propiedades antibacterianas. Vierte el alcohol isopropílico o vodka en el frasco hasta llenarlo casi por completo. El alcohol ayudará a eliminar los malos olores de la habitación.

4. Mezcla con agua destilada

Luego, agrega agua destilada al frasco para diluir la concentración del alcohol y hacer que el ambientador sea menos agresivo para el olfato. Llena el frasco hasta cerca de tres cuartos de su capacidad total.

5. Agita y deja reposar

Cierra bien el frasco con su tapa y agítalo suavemente para mezclar todos los ingredientes. Luego, déjalo reposar durante al menos 24 horas en un lugar fresco y oscuro. Esto permitirá que los aromas se fusionen y se intensifiquen.

Usa tu ambientador:

Una vez transcurrido el tiempo de reposo, tu ambientador casero de menta y alcohol estará listo para usar. Simplemente agita el frasco suavemente y rocía el contenido en el aire de tu habitación, evitando rociarlo directamente sobre muebles o superficies delicadas. La frescura de la menta y las propiedades desodorantes del alcohol se combinarán para eliminar los malos olores y dejar un aroma agradable y refrescante en tu espacio.

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