Carlos Mario Zuluaga

Zuluaga tiene una vasta experiencia tanto en el sector empresarial como en el fútbol; es decir, tiene el perfil ideal para lograr los objetivos que no son otros distintos a conseguir más dinero para el fútbol por vías como patrocinios y derechos de TV, que justo se están negociando para su renovación o en su defecto cambio de modelo.

Por fortuna, el propio Zuluaga se ha puesto la vara más alta y parece estar interesado en mejorar el producto, porque sabe que es la mejor manera de conseguir más recursos. No quiere “dimayoradas” y por eso está dispuesto a hacer lo correspondiente: que las canchas estén en buen estado, que los árbitros lo hagan mejor, que haya menos equipos en la A para que tengamos menos partidos de relleno, que se construya por fin la categoría C profesional y que el reglamento cubra sus vacíos. De todo eso habló en su rueda de prensa de presentación y también se lo expresó a sus más cercanos.

El problema es que sus antecesores tenían los mismos objetivos y terminaron por fuera. En últimas, eso depende de su capacidad de gestión, no tanto hacia afuera, porque tiene la hoja de vida para hacerlo, sino hacia adentro. Zuluaga encuentra una entidad más dividida que nunca. Si bien el aplauso fue de los 36 socios cuando se conoció el resultado de la votación, es cierto que la diferencia en su favor fue de apenas cuatro votos.

Por ahora lo que plantea suena acertado para todos, pero habrá que ver cómo logra que los clubes voten por una reducción de equipos en la A. Cabe recordar que el aumento de 18 a 20 coincide con el declive en el rendimiento de los nuestros en torneos internacionales. Somos de los pocos países en donde en la categoría élite hay más equipos que en la segunda división. Es decir, no hay ninguna élite. Pero como los propios clubes son los perjudicados, será complicado que voten a favor de su intención.

Lo mismo pasa con la manera como se dividen el dinero proveniente de los derechos de TV. Los clubes grandes reclaman más dinero que sus pares con el argumento válido de que son los que prenden los televisores, razón por la que quienes se disputan los derechos pagan lo que pagan.

Los pequeños, que son más en las votaciones, no están dispuestos a dejarse quitar la manera equitativa como se los reparten hoy. Para cumplirles a los grandes y que estos lo puedan hacer cada vez mejor, tendrá que conseguir más dinero y convencer a los pequeños de que aprueben las variables. Difícil que se la compren, y así con todo lo esencial. Igual, ojalá lo logre, por el bien del fútbol.

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